El indicador Riesgo País de la Argentina continuaba este jueves su escalada con una suba del 0,3%, por lo que alcanzaba los 1.822 puntos básicos y anotaba así desde la caída posterior a la reestructuración de la deuda en septiembre de 2020.
Este índice que elabora la banca estadounidense de riesgo JP Morgan acumulaba una suba del 6,4% en lo que va de noviembre y alcanzaba así un incremento del 32,8% desde que se inició el año 2021.
La suba del indicador se daba a pesar de que no se registraban negocios representativos para los bonos por el feriado en los Estados Unidos debido al Día de Acción de Gracias. Todo estaba atado a la desconfianza de los inversores sobre los papeles argentinos.
El Gobierno argentino ha empezado a enviar señales a los mercados después de las elecciones legislativas del 14 de noviembre, en la que fue derrotado a nivel nacional, pero no ha logrado torcer el rumbo en el humor de los inversores financieros.
Tampoco los datos positivos sobre la economía están impactando en las variables financieras y bursátiles. La actividad económica creció 1,2% en septiembre y 11,6% interanual. Así superó el nivel pre-covid por tercer mes consecutivo y está 4,7% por encima de 2019, según Economía.
El ministro de Economía, Martín Guzmán, evaluó esos datos y señaló que hay una “fuerte y sólida” recuperación económica. “Con esta evolución consecuente con la política económica para la recuperación que estamos llevando a cabo, proyectamos un crecimiento del PIB para 2021 de casi 10%”, agregó el funcionario.
En paralelo, el Gobierno nacional aceleró el ritmo de reducción del déficit fiscal primario gracias a que los ingresos se vienen incrementando muy por encima del gasto, por lo que el rojo de los diez primeros meses del año se ubicó en el 1,8% del Producto Interno Bruto (PIB).
En el mismo período de 2020, el déficit fiscal primario alcanzaba el 5,1%. De esta manera, el déficit fiscal primario registró en los primeros diez meses del año una caída del 64,7%, respecto del mismo período del año pasado en relación al Producto Interno Bruto del país.
El mercado ahora espera que en la primera semana de diciembre el ministro envíe al Congreso el denominado “Plan Económico Plurianual” con las metas monetarias, cambiarias, de déficit, inflación y tipo de cambio para los próximos tres a cinco años.
El Riesgo País se construye a partir de una estimación del mercado acerca de la capacidad o incapacidad que tiene un país de cumplir con los pagos del capital o de los intereses de su deuda al momento de su vencimiento, tomando como base una canasta determinada de bonos.
Cuanta menor certeza existe que el país honre sus obligaciones, más alto es el indicador (técnicamente llamado Emerging Markets Bonds Index o Indicador de Bonos de Mercados Emergentes) EMBI de un país, y viceversa.
Así, el indicador resultante es la sobretasa de interés que debería pagar la Argentina por encima de la tasa de referencia del Tesoro estadounidense si quisiera salir al mercado internacional de financiamiento privado para colocar deuda.
Y la suba que viene experimentando el riesgo argentino se da en un marco de salida de la pandemia de Covid-19 sin financiamiento externo y con negociaciones de refinanciación de deuda en su tramo final con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Desde que se inició 2021, la mayoría de los bonos registran pérdidas: AL30D, desciende 26,5%; AL35D, 17,1%; GD30D, 16,9%; y GD35D, 14,6%.
En esa lista de bonos, el de mayor precio es del GD30D, con un valor de 34,54 dólares; y el peor es el AL30D, con un nivel de 30,08 dólares. Este último ha sido en lo que va del año el bono más operado por los inversores entre los papeles argentinos.
El papel AL30D -que este jueves bajaba 0,23%- es la especie en dólares del Bonar 2030. Venían siendo muy utilizado por inversores pero sólo con fines cambiarios, para poder salir de los pesos sorteando el cepo que restringe la compra y venta de moneda extranjera en el país.