Con los datos que ya se conocieron de la inflación de 2021 y la incertidumbre sobre cuál podría ser el nivel que alcance este año, varios gremios han comenzado las negociaciones paritarias para el 2022 y otros están pidiendo revisión de los acuerdos. Muchos trabajadores privados aún están recibiendo los aumentos que se acordaron. En cuanto a los incrementos para este año, los porcentajes dependen de los salarios de base y del poder de negociación de cada sector.
Los bancarios tuvieron ayer su primera reunión paritaria 2022, después de cerrar la del 2021 en noviembre, con un ajuste adicional del 8%, que llevó a los trabajadores del rubro a un 51% de aumento el año pasado. Sergio Giménez, de La Bancaria Mendoza, explicó que pensaron que le podrían ganar en uno o dos puntos a la inflación, pero terminaron empatando; lo que de todos modos consideró positivo, porque lograron preservar el poder adquisitivo.
La semana pasada, el titular del sindicato bancario a nivel nacional, Sergio Palazzo, le solicitó al ministro de Trabajo, Claudio Moroni, que reabriera la paritaria y el primer encuentro fue ayer en la mañana. Giménez comentó que estaban esperando el resultado, pero que se iba a pedir una suma fija o un porcentaje para enero, febrero y marzo, para, con una proyección un poco más sólida de la inflación, definir el ajuste 2022, con una cláusula de revisión.
El 2021 cerró con una suba de precios al consumidor del 50,9% a nivel nacional y para este año se espera que el número sea similar o superior, aunque el gobierno haya considerado un aumento de apenas 33% en el presupuesto 2022. De hecho, el Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) del Banco Central mostró que se anticipa una inflación de 54,8% para 2022.
Otro de los sectores que está negociando en estos días es Comercio. El titular de la Federación Argentina de Empleados de Comercios y Servicios (Faecys), Armando Cavalieri, ha solicitado a las cámaras un 16% adicional de incremento, en el marco de la cláusula de revisión, lo que les permitiría cerrar con un aumento cercano al 60% y ganarle a la inflación.
A los más de 1,2 millón de afiliados que tiene la federación en el país aún les resta recibir dos incrementos -del 8% con los sueldos de enero y de otro 8% con los de febrero-, como parte del acuerdo que se cerró en agosto. Con la suba del primero de ellos, el salario de la actividad comienza en $ 70.770 y se le adiciona una suma remunerativa de $ 4.529, que es variable según la categoría.
Los trabajadores vitivinícolas están a la espera de la reapertura de las discusiones salariales. El secretario gremial de Foeva (Federación de Obreros y Empleados Vitivinícolas y Afines), Juan Carlos Aguirre, comentó que el lunes viaja a Buenos Aires, ya que en los últimos dos años las paritarias se han desarrollado desde allá. Aunque prefirió no hablar de un porcentaje de incremento hasta que no se analice en ese marco, señaló que confían en que la segunda semana de febrero ya se convoque a una reunión paritaria.
En 2021, el pedido inicial del gremio era que la remuneración del sector alcanzara el valor de la Canasta Básica. Esto significaba un aumento de entre el 85% y el 100%, según se consideraran o no ciertos ítems. Finalmente, se cerró con un 63% de aumento -57% en el básico y el resto en ítems no remunerativos-, lo que llevó el sueldo de los trabajadores de viña un poco por encima de los $40 mil.
Los empleados gastronómicos y hoteleros lograron un incremento del 49,8% para la paritaria 2021 y aún resta aplicar dos ajustes, con los salarios de enero y marzo. Sin embargo, el secretario general de Uthgra (Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina Seccional Mendoza), Humberto Montivero, planteó que ese porcentaje no es suficiente y, de hecho, el salario promedio en setiembre de 2021 era de $ 40.771. Por eso, resaltó que pueden solicitar la revisión.
El titular del gremio indicó que, si bien la discusión salarial es nacional, necesitan que el turismo internacional vuelva a venir a la provincia para que la actividad repunte. Durante la pandemia, estiman desde la entidad, se perdieron unos 3 mil puestos de puestos de trabajo del sector en Mendoza. Y si bien ahora se han recuperado en parte, hay varios comercios que aún tienen a sus empleados en negro y que siguen utilizando el salario como variable de ajuste cuando el negocio no funciona como esperaban.
En el caso de los petroleros, la paritaria va de mayo a abril del año siguiente y en 2021 se fijó una suba en el salario del 35%, pero incluyeron una cláusula de revisión para marzo. El secretario general del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Cuyo, Gabriel Barroso, ha explicado que en el rubro hay salarios muy dispares, entre los $70 mil y los $200 mil, dependiendo de la carga horaria, el horario de trabajo, si tienen varias horas de viaje al yacimiento, si cumplen un régimen de varios días consecutivos de labor, etc.
La Unión de Obreros Metalúrgicos (UOM) cerró un acuerdo para 2021 que establece un aumento del 50,2% y del que aún restan cobrar tres ajustes del 5%, con los salarios de enero, febrero y marzo. El titular de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de Mendoza, Mariano Guizzo, señaló que en diciembre se acordó adelantar un incremento que estaba previsto para febrero y prorratearlo. Y sumó que ya se está hablando de empezar a discutir la paritaria 2022.
