El empleo privado registrado lleva doce meses consecutivos de crecimiento en Mendoza y en marzo alcanzó el repunte más importante desde la salida de aislamiento social, pero sin lograr el nivel de empleo de 2019. Para los economistas, esta tendencia en alza puede mantenerse durante los próximos meses, aunque la inflación impactará en los niveles de producción.
Según datos publicados por el Ministerio de Trabajo de la Nación, en el tercer mes de este año la provincia llegó a los 247.627 empleos formales, un número que supera por 8.386 personas al dato de marzo de 2021 y por 5.354 personas al valor de febrero de este mismo año.
En vías de recuperación
Repasando la evolución histórica del mercado laboral mendocino, se observa que, desde el inicio de la pandemia, la provincia -al igual que el resto del país- entró en una profunda crisis que hundió a la economía y destruyó miles de empleos en casi todos los rubros.
El punto más bajo fue septiembre de 2020, un mes el que la mayoría de las restricciones persistían y las empresas aún se encontraban en una situación crítica. De hecho, muchas firmas quedaron en el camino durante esa época, cerrando sus puertas de forma definitiva o pasando a la informalidad.
Hacia fines de 2020 la tendencia de caída continuó, pero se empezó a notar una desaceleración en los números negativos. Así fue que para abril de 2021 ya se empezaron a ver los primeros valores positivos. En el cuarto mes del año pasado el empleo privado registrado de Mendoza creció 0,4% respecto al mismo mes de 2020.
Ese fue un dato alentador, teniendo en cuenta que se frenó por fin la caída, pero al mismo tiempo preocupante, porque la mejora fue muy leve en la comparación contra abril de 2020, mes en que la economía estuvo casi completamente frenada. Además, la recuperación de Mendoza fue en ese momento más discreta que la que se dio en el resto del país.
Lentamente los números positivos comenzaron a ser más importantes. Para julio de 2021 ya se hablaba de un repunte mayor al 1%, en noviembre se alcanzó el 2% y en enero de este año se llegó por primera vez al 3% de recuperación. El dato de marzo de 2022 dejó como resultado una mejora interanual del 3,5%, el porcentaje más elevado desde que inició el proceso de recuperación.
No obstante, es innegable que aún queda un largo camino por recorrer. Es que, en marzo de 2019, antes del inicio de la pandemia, Mendoza tenía 256.409 empleados privado registrados, casi 8.800 más que en la actualidad.
¿Crecimiento formal?
“Lo que estamos viendo es una recuperación del empleo privado, pero no llegamos al nivel que había en 2019. Este crecimiento se da después de la abrupta caída del 2020, cuando se cerró la actividad económica a causa de las medidas sanitarias por pandemia”, introdujo la economista Paula Pía Ariet. La directora de Gestión Consultores recordó que con las distintas olas del Covid se produjeron tanto períodos de crecimientos como de caídas.
No obstante, destacó que la capacidad productiva ha comenzado a recuperarse, apalancada por la mayor estabilidad. “Sabemos que no se volverá a cerrar la actividad”, comentó. Aun así, la especialista en empleo duda que la tendencia se mantenga, debido a la “inflación altísima” que sufre el país.
“La falta de medidas de incentivo a la producción y la inestabilidad que produce el no saber si al mes siguiente se podrán cubrir los costos, causa desaliento. Siempre en procesos inflacionarios la actividad económica cae”, remarcó. Se mostró de acuerdo el asesor del Ministerio de Economía provincial, Sebastián Laza, quien consideró que por causa de esos factores “la economía no está creciendo como debería”.
Vitaminas y crecimiento
El economista Sebastián Laza opinó que la inflación y la suba de tasas no pueden mandar a la economía a una recesión, al menos durante este año, pero aclaró que le hacen un daño enorme a las expectativas y a la inversión. “El descalabro de la macroeconomía nacional le puso un techo de 4 puntos interanuales al crecimiento del empleo”, lamentó.
Sin embargo, el asesor del Ministerio de Economía de la provincia destacó que “el empleo registrado en Mendoza se está recuperando a una buena tasa” y atribuyó la mejora a los programas de incentivo a la producción, como Mendoza Activa.
En tanto, Nicolás Aroma, responsable de los equipos técnicos del PJ, planteó que el empleo privado sigue creciendo al ritmo de la recuperación de la economía en general, y destacó el rol clave de sectores como la industria y la construcción, que son motores fundamentales para la generación de empleo privado. Destacó además que luego de la recuperación postpandemia, aún hay fuertes indicadores de crecimiento y se estima -desde el Banco Mundial- que el PBI crecerá 2,5% este año. “Hay que decir también que estamos en niveles históricamente bajos de desempleo nacional, cercanos al 7%”, puntualizó.
Para Aroma la continuidad del crecimiento va estar dada por la disponibilidad de divisas que permitan sostenerlo. “Reducir la aceleración de precios es importante, porque sino la tasa de interés que corre por detrás de los precios, tiene efectos negativos para la actividad económica”, analizó el economista.