Empresarios de distintos rubros, gastronómicos, comerciantes, prestadores de servicios, hoteleros han quedado azorados. Comenzaron a llegar las boletas de la luz y se encontraron con montos totalmente imprevistos. Las actualizaciones en el valor del kilowatts, son tres veces superiores a lo que esperaban.
Desde la Federación Económica de Mendoza (FEM) comenzaron a realizar gestiones en todos los niveles del Estado y ya se escuchan pedidos como rebajas impositivas para poder afrontar el pago de la energía eléctrica.
Además adelantaron, que de no encontrar una salida, corren riesgos los puestos de trabajo o el cierre de los negocios.
Sin disimulo alguno, Santiago Laugero, titular de la FEM, dijo que “realmente no esperábamos estos montos”.
El dirigente y empresario explicó que “las estimaciones que teníamos era una factura, como mucho, el doble de la anterior, pero las boletas que se están recibiendo vienen con actualizaciones que rondan el triple de aumento”.
Para poner blanco sobre negro, el presidente de la FEM comentó que sobre un costo de $51 por KW, con la actualización pasó a valer $121.
“Y eso que a ahora es el ajuste del precio del kw porque todavía se aplica el subsidio nacional, después va a venir con el reajuste por la quita de los subsidios a la energía que está llevando a cabo el Gobierno nacional. Eso ahora como que lo han frenado, no lo van a sacar para que no haya tanto impacto (en la inflación) pero igualmente el número es duro”, acotó.
Laugero recordó que “ya veníamos con actualizaciones en la tarifa, no es algo que se hizo después de tres años, entonces este ajuste es fuerte”.
Para el empresario, de no encontrar una solución y en el corto plazo “esta tarifa combinada con la caída en las ventas se hacen inviables, y va a generar que se corte por el lado del empleo o se va a cortar por la reducción del stock en los capitales, pero lo cierto es que es un combo que hoy las empresas y en especial lo negocios del ámbito comercial, no están en condiciones de asumir”.
Según Adrián Alin, presidente de la Cámara de Comercio de Mendoza ya se está viendo pérdidas de fuentes de trabajo “por el cierre de comercios” aunque “todavía no se ve en cascadas como en otros tiempos”, pero si continúa “también va a repercutir en la caída de la recaudación porque no se podrán pagar los impuestos y por supuesto en el empleo”.
Entre las peticiones que ya comenzaron a formular desde la FEM a las autoridades, tanto provinciales como municipales, está la alternativa de una reducción impositiva para destinar ese alivio fiscal al pago de la boleta de la luz. También plantean el ayudar a los finqueros reacomodando el subsidio al riego agrícola.
El caso de Córdoba, que salió a financiar a los usuarios residenciales, pymes y empresas con líneas específicas para que puedan pagar la boleta y devuelvan el dinero en cuotas con un interés mínimo (8%) está más que presente entre los empresarios locales.
“Lamentablemente nosotros no tenemos un banco provincial pero buscar alguna medida de ese estilo sería una buena medida”, dijo Laugero.
Desde el ámbito vitivinícola también pusieron el grito en el cielo. Fabián Ruggeri, presidente de Acovi sostuvo que hay empresas que sufrieron incrementos algo más moderados, pero que no bajan del 140%
“Se hicieron los pedidos a la Nación a través de la Secretaría de Bioeconomía para que no quiten los subsidios pero por supuesto que no nos han escuchado siquiera. Está todo gestionado pero no creo que venga absolutamente nada”, afirmó el dirigente vitícola y productor.
“Es un palo más que tenemos, el vino no está aumentando, la uva se clavó el precio y no aumentó nada y estamos cerrando una paritaria para marzo, abril y mayo con un 88%, más o menos de promedio, de incremento para los tres meses. A eso se suma una boleta de luz con un 140% de incremento y hemos tenido entre enero y febrero casi un más del 30% de aumento en los combustibles. Un muy mal comienzo de año”, sentenció Ruggeri.
Fernando Gaovrón, empresario agroindustrial y presidente de la específica de Industria de la Cámara de Alvear aseguro que las boletas de la energía eléctrica “llegaron con valores de hasta cuatro veces más que la del mes anterior. Esto impacta de lleno en la estructura de costos de las empresas y complica mucho, más cuando todavía estamos en plena producción”.
Que bajen algo los proveedores
Arturo Pechemiel, integrante de la Cámara de Comercio de Tunuyán, es un especialista en la materia porque tiene una maestría en energía, y ofreció una mirada más que particular.
El comerciante aseguró que “el problema de lo que sucede no es lo que está llegando hoy, sino que tan irrisorio era lo que pagábamos antes, hizo que muchísima gente nunca aprendiera a consumir energía de una manera responsable, entonces ya sea a la hora del consumo había muchos derroches y a la hora de hacer inversiones también porque no se buscaba la eficiencia energética”, explicó.
Según Pehemiel, “era tan irrisorio el valor de lo que había, porque además del subsidio el precio de la energía estaba pisado, que no lo contemplabas ni en tus costos. Pero ahora todo eso se está sufriendo y el impacto en las empresas es importante”, reconoció.
Entre las estrategias que iniciaron para aminorar el impacto de todos los aumentos, además de la energía, que se han producido en los últimos meses, y no llegar al extremo de tener que despedir personal, el empresario pyme confió que empezaron a reclamarles a los proveedores que también hagan un esfuerzo y rebajen precios.
“Hay un reacomodamiento de precios muy importantes, pero las pymes ven muchas medidas necesarias y nadie quiere salir a despedir personal porque los costos se te fueron altos, lo que sí se está exigiendo es que los proveedores reacomoden también sus precios. Si antes actualizaron cuando el dólar subía, ahora que bajo como $250 el dólar, que reacomoden a la baja los precios”, precisó.