El Gobierno Nacional busca contener los aumentos en la carne vacuna, y para ello decidieron suspender las exportaciones por 30 días. Se trata de una medida conocida por los argentinos, si se tiene en cuenta que en el año 2006, bajo la administración del entonces presidente, Néstor Kirchner, se aplicó una política similar.
La medida fue comunicada a los consorcios exportadores e inmediatamente, el campo expresó su rechazo mediante la convocatoria a un paro. Es que, el antecedente kirchnerista no trae los mejores recuerdos para este sector, y tampoco habría sido efectiva para el bolsillo del consumidor.
Al respecto, el diputado Nacional Pro, el mendocino Omar De Marchi, recurrió a una tapa de Clarín de esa época para señalar que la medida “atrasa 15 años”. “El gobierno ha comunicado a exportadores de carnes, que cierran exportaciones por 30 días hasta que el mercado interno se ordene. La misma receta produce los mismos resultados”, advirtió.
“Lo más grave: del tercer lugar que teníamos en exportaciones de carne en el mundo en 2005, pasamos al lugar 11 en 2015. Los efectos siempre se ven en el largo plazo. Hoy, desesperados por las elecciones, rompen todo, y vuelven a recetas que siempre fracasaron”, completó.
De la misma manera, desde la Sociedad Rural recordaron que aquella medida, “llevó a la quiebra a cientos de criadores de ganado”.
“El cierre de exportaciones de carne por 30 días es un error y un paso atrás en todo sentido. Causará un daño irreparable a un sector produtivo que ha demostrado que genera empleo y actividad en todo el territorio nacional”, indicó el presidente de la SRA, Daniel Pellegrina y explicó qué pasará cuando se aplique la medida.
“El daño que provoca la medida va a disminuir la oferta de carne, haciendo que los precios terminen subiendo como ya ocurrió en el pasado. Es inconcebible que se elijan recetas que ya fracasaron a falta de las soluciones de fondo que Argentina necesita”, completó.
Es que luego de la medida tomada en 2006, se perdieron 17 millones de cabezas, se perdieron 12 mil empleos de operarios, y más de 10 mil ganaderos. En ese momento se anunció que el cierre sería por 180 días, pero terminó extendiéndose hasta el año 2015, con la profundización de los controles a la exportación. En tanto que en el mismo periodo de tiempo, el precio de la carne subió un 300%, por encima de la inflación del mismo periodo.
El entrerriano Alfredo De Angeli, hoy senador por “Juntos por el Cambio”, y quien encabezara en 2008 las protestas contra la administración de Cristina Fernández de Kirchner contra las retenciones móviles, también se refirió a lo sucedido en 2006, y a las similitudes de aquella medida con la decisión actual: “Es una locura cerrar las exportaciones de carne vacuna. Van a volver a destruir todo lo que costó tantos años construir después del 2006 cuando cerraron las exportaciones (perdimos el 20% del stock ganadero y no pudieron controlar la inflación)”, apuntó.