Tras recuperar Vega Grande, el área petrolera más alta sobre el nivel del mar de Argentina (2.800 m), el Ministerio de Energía y Ambiente anunció que la empresa G&G Service SRL se hará cargo de las operaciones del yacimiento, puesto en valor por la Empresa Mendocina de Energía (Emesa).
Emesa logró poner en condiciones un área que había quedado inactiva luego de tres años de trabajo de puesta a punto, evaluaciones técnicas, inversión en infraestructura, reparaciones y análisis de reservas.
La reactivación del área fue un hito para la provincia, ya que por primera vez se llevó un equipo de torre a un yacimiento de gran altura. De este modo, pasó de estar abandonada a tener picos de producción de hasta 3.600 bbl/mes, sorteando todas dificultades climáticas y operativas de un área tan aislada. Se generó un efecto derrame en las ganancias con el fisco local (regalías, cánones, ingresos brutos, etc.), empresas de servicios y personal operativo del área.
“Emesa invirtió en el yacimiento, lo hizo operativo y realizó grandes mejoras en materia medioambiental”, explicó la ministra de Energía y Ambiente, Jimena Latorre.
“Con el yacimiento en operación, se buscó un operador definitivo con una licitación”, aseguró el presidente de Emesa, Pablo Magistocchi. “El rol de Emesa fue poner en valor esta área y tomar el riesgo de hacerla operativa para que un nuevo operador pueda continuar con la explotación del yacimiento”, amplió.
Habiendo cumplido su labor de puesta en valor del área, Emesa llamó a licitación por los derechos del área, en abril de 2024. El proceso despertó el interés de cuatro compañías operadoras y la oferta seleccionada fue la de la empresa GyG Service SRL, que pagó USD 685.000 para hacerse de este activo.
Luego de la aprobación de la Dirección de Hidrocarburos y Ministerio de Energía y Ambiente, en los próximos días se procederá al traspaso de titularidad a GyG.
La empresa tiene un compromiso mínimo de inversión de USD 1 millón, y cuenta con la ventaja de poseer equipos propios de torre, lo cual es fundamental para sostener el ritmo de reactivación e incremento de la producción y así extender al máximo la vida útil del yacimiento.
Puesta en valor para la reactivación hidrocarburífera
Las acciones por la actividad hidrocarburífera como política de Estado han sido uno de los pilares de las acciones del Gobierno de Mendoza. Por esto en 2021, la Dirección de Hidrocarburos otorgó un permiso provisorio de ingreso al área a Emesa con el fin de relevar, reacondicionar las instalaciones y proceder con la puesta en marcha del yacimiento.
En dicha inspección se observó que, al estar tanto tiempo inactiva, el área había sido vandalizada, por lo que comenzaron los trabajos de acondicionamiento.
Además de elaborarse y presentarse el Estudio Ambiental de Base a la Dirección de Protección Ambiental (DPA), se programó el remplazo de 8 tramos del oleoducto principal, mantenimiento y certificación de las 30 válvulas y la construcción de bermas en los tramos más críticos del oleoducto.
Un área con mucha historia
• A finales de la década de 1970, YPF estudió el área de Vega Grande y perforo al sur del bloque dos pozos; el YPF.Md.AM-1 y el YPF.Md.TE-1, sin recuperación de hidrocarburos y consecuente abandono de los pozos.
• Finalmente, en 1984, YPF perforó el pozo descubridor YPF.Md.VG-1 con buenos niveles de producción.
• El segundo pozo productor, ubicado al sur del pozo YPF.Md.VG x-1 y denominado YPF.Md.VG e-2, fue perforado 1986. El pozo YPF.Md.VG-3, ubicado al este del YPF.Md.VG x-1, perforado en 1988/1989, también resultó productor de hidrocarburos.
• El pozo YPF.Md.VG-6, fue perforado en 1987 y terminado en 1989. Se encontró bajo nivel de hidrocarburos, pero en cambio mostró buenos volúmenes de gas.
• En julio de 1991, esta concesión fue otorgada en favor de Petroquímica Comodoro Rivadavia SA (PCR). Se perforó el pozo PCR.Md.VG-100, horizontal, y si bien produjo petróleo, solo acumuló un volumen reducido de hidrocarburos. La operación de PCR finaliza en 1995.
• En febrero de 1995 comienza la operación de Grecoil y CIA SRL, la cual continuaría hasta finales de la concesión hasta el primer trimestre de 2018.
• Grecoil y CIA SRL, en los años venideros, cambiaría de propietarios y sufriría fusiones con otros grupos de empresas. Primero fue adquirida por Andes Energía SA hasta mediados de 2017, cuando Andes Energía se fusionó con la Petrolera El Trébol (PETSA), subsidiaria en Argentina de la suiza Mercuria, sumando los activos en producción y exploración de ambas.
• Por este acuerdo se creó una nueva compañía, llamada Phoenix Global Resources, y la operación del área terminó en 2018, para ser revertida a la provincia de Mendoza.
• Transcurrieron casi tres años de inactividad del yacimiento hasta que, en junio de 2021, mediante un proceso llevado a cabo por el Gobierno de Mendoza, se decreta la cesión a favor de Emesa, que logró la recuperación, puesta en valor y adjudicación a la empresa ganadora.