El programa Mendoza Activa cerró su quinta etapa con inversiones por más de $1.286 millones, con 251 proyectos presentados en diciembre por parte de los sectores productivos de Mendoza. De esta forma, en un año marcado por la pandemia y la parálisis económica en todo el mundo, la provincia logró movilizar un total de $ 7.872 millones en inversiones privadas, manteniendo activa la producción y el empleo en un contexto adverso.
Los proyectos de construcción, comercio, agricultura y maquinaria sumaron un total de .1601, con iniciativas que fueron desde mejoras y ampliaciones habitacionales hasta tecnología de punta para bodegas o compra de stock en comercios locales.
El programa llegó a todos los departamentos y los rubros que lideraron las inversiones fueron la construcción y la industria, seguidos por comercio y servicios y agricultura; lo que demostró, además, la inyección que significó el programa para la industrialización y la diversificación de la matriz productiva de la provincia.
Para concretar este plan lanzado en julio pasado por el gobierno de Rodolfo Suarez, el ministro de Economía y Energía, Enrique Vaquié, se reunió con cámaras empresariales y comerciales, además de los jefes comunales de cada departamento. La idea fue desde un principio lanzar un programa transversal, que llegara a todos los rincones de Mendoza, incluso a aquellos que no tenían acceso a Internet para ver a las convocatorias.
“Mendoza logró superar la dicotomía economía o salud. Esta estrategia permitió cuidar el empleo privado mientras se luchaba contra el Covid-19”, aseguró el ministro Vaquié, quien agradeció a municipios, pymes, emprendedores, cámaras empresariales y al equipo del Ministerio de Economía por el éxito del plan. “Esto demuestra que el Estado puede trabajar codo a codo con los privados para hacer andar la rueda de la Economía”, afirmó.
Incentivo a las inversiones
Ante una crisis mundial sin precedentes en la historia reciente, que afectó la salud y la economía en todo el planeta, el gobierno de Mendoza se planteó cómo hacer para que el sector productivo no quedara paralizado y trabajara codo a codo con el Estado. Con este premisa, se diseñó este programa desde el Ministerio de Economía y Energía en marzo, cuando comenzaron las primeras restricciones en Argentina.
Se planteó incentivar las inversiones a cambio de una devolución del 40% en Aportes No Reembolsables (ANR) y en crédito en billeteras virtuales para volcar en los sectores más afectados por el COVID-19: turismo, gastronomía y cultura. De esta forma, los individuos, empresas y familias que participaron obtuvieron beneficios fiscales, bonificaciones y acompañamiento permanente por parte del gobierno. Y sectores castigados como el turismo y la gastronomía tuvieron fomento al consumo.
El programa seguirá vigente durante 2021, ya que, como afirma el ministro Vaquié, se ha diseñado pensando en la pandemia “y en la pospandemia”. Los requisitos se pueden consultar aquí.