La economía del conocimiento en 2021 ha consolidado tu posición como el tercer sector exportador de la economía de Mendoza por detrás del pool agroindustrial. Los servicios basados en el conocimiento (SBC), impulsados principalmente por el desarrollo de software, concretaron operaciones en el extranjero por 110 millones de dólares; es decir casi un 7% frente a los 1.600 millones de dólares registrados que generaron los productos y servicios de las empresas locales colocados en el exterior.
El año pasado los SBC ya alcanzaron un volumen de un tercio de los U$S 300 millones anuales proyectados para el año 2030, mostrando su alta potencialidad y un crecimiento sostenido de su ecosistema. Su participación en el balance comercial los acerca a los U$S190 millones que generaron las frutas y hortalizas industrializadas, mientras que el líder de las exportaciones locales continua siendo el sector vitivinícola con despachos al extranjero por más de U$S 800 millones anuales.
Si bien en las estadísticas del comercio exportador de Mendoza aún no se incluye de manera formal a los SBC, dado que el rubro es difícil de cuantificar bajo las formas tradicionales, su desempeño puede leerse por medio del cruce de datos. Analizando la información de la Balanza de Pagos del Banco Central de la República Argentina (BCRA) con datos de empleo privado registrado por el Sistema Previsional Argentino (SIPA), sostuvieron los economistas Sebastián Laza y Mauricio Lacourt.
De acuerdo al informe elaborado por los técnicos el cálculo del volumen comercial se obtiene cuantificando el empleo registrado que genera el sector, en el se detalla que el 1,6% de la masa salarial total en todo el país de los SBC está en blanco, pero la medición se realiza por domicilio de la empresa y no por domicilio del trabajador, porque “si lo hiciéramos de esta última forma, estaríamos sobrevaluando las exportaciones mendocinas, al contabilizar trabajo mendocino realizado para empresas fuera de la provincia”, señaló Laza.
Actualmente, en el campo de los Servicios de Programación, el 30% de los trabajadores que son residentes en Mendoza realiza tareas para empresas de tecnología fuera de la provincia, “lo que genera exportaciones que no son mendocinas, aunque gran parte del valor agregado profesional sí lo sea”, aclara el informe. A nivel nacional, durante 2021, el SBC ha generado exportaciones por U$S 6.900 millones, mientras que el volumen de la provincia de acuerdo a la masa salarial nacional privada registrada equivale al 1,6%.
A un ritmo acelerado
Alejando Zlotolow, Subsecretario de Comercio e Industria del gobierno de Mendoza, ha señalado que el estudio sobre las exportaciones de los Servicios Basados en el Conocimiento durante 2021 puede apreciarse la tendencia a un crecimiento a un ritmo acelerado del sector “al igual que la generación de empleo”, el cual va de la mano de una fuerte articulación entre el sector público y privado.
Para el funcionario, “Ese crecimiento tiene lógica con la competitividad que ha alcanzado el sector, de la mano de jugadores locales e inversiones externas. Hay una apuesta concreta a la formación de talento, al apoyo a la innovación y a la creación de nuevas empresas”. Vale recordar, que a principios de setiembre se presentaron 174 propuestas para ser evaluadas en el programa Mendoza Emprende 2.0, iniciativa del Gobierno que ofrece una inversión en pesos equivalente a US$ 15.000 para pymes y emprendedores que desarrollen proyectos de base tecnológica (Information Technology).
El crecimiento del sector no es una realidad solo apreciable en el Gran Mendoza, Ángel Quiles, presidente del Polo de Innovación Tecnológica (PIT), explicó que el escenario para el sector en el sur de la provincia está en una etapa posicionamiento, “dado que se ha dado un ecosistema de talento que hace tres año no estaba. Las universidades e instituciones se han enfocado en la formación de profesionales para generar productos de carácter exportables”.
Hacia el mercado exterior
Diego Marín, del estudio Lindo que desarrolla unidades de negocio web para las verticales de trasporte de larga distancia y supermercados, comentó que por ahora están trabajando para empresas de Argentina y Brasil; las des “Brasil son propias, por lo que no exportamos servicios sino le brindamos servicio a nuestro propio software. Pero si tenemos que contratar profesionales tercerizados para el desarrollo de algunos proyectos, la hora de programación dependiendo del lenguaje cuesta entre los U$S30 y U$S70″.
La demanda de servicios es alta, porque luego de la pandemia cada vez más se invierte en tecnología y en unidades de negocio para Internet. “De acuerdo a nuestra experiencia es posible exportar y hemos recibido pedidos desde Colombia, pero estamos enfocados en el mercado nacional. Pero obviamente, el mejor negocio es la exportación de servicios para desarrollos”, puntualizó Marín.
Ángel Quiles, por su parte, destacó que en general, en San Rafael, General Alvear y Malarque, “hay 500 profesionales trabajando en el sector y actualmente tienen una clasificación semi-senior, que era es lo que nos hacía falta. En este contexto han surgido empresas de cuatro o cinco socios, que desarrollan productos de nicho y que están colocando en el mercado exterior. La mayoría de los productos se venden a Europa, puntualmente a Francia; mientras que las empresas de más trayectoria operan en el mercado de Estados Unidos”.
En 2021 la economía de Mendoza exportó 1.600 millones de dólares, de los cuales la mitad la concentró el agrupamiento vitivinícola. Pero este cálculo no incluye a las exportaciones de SBC (U$S 110 millones) dada la dificultad de su medición de acuerdo a la forma tradicional. Sin embargo, al comparar los volúmenes comerciales del resto de los sectores exportadores locales se puede observar el posicionamiento que ha tenido la economía del conocimiento. Sector que en los últimos años viene expresando su crecimiento a un ritmo de dos dígitos anuales tanto en empleo (de 2018 a 2022, el sector generó 1.500 posiciones nuevas de trabajo), como en el desarrollo de software y servicios informáticos.