El presupuesto para la actual campaña contra la lobesia botrana en Mendoza puede superar los $ 590 millones, la provincia con $ 120 millones fondeará la primera etapa de la licitación de insumos para comenzar la temporada 2020-2021. La apertura de los sobres, para la compra de feromonas, está programada para el 7 de setiembre. En octubre y noviembre se deberán realizar los trabajos de la segunda y tercera fase del combate contra la polilla de la vid. Desde la nación no hay comunicación oficial sobre el monto que destinará para estas tareas.
El presidente del Instituto de Sanidad y Calidad Agropecuaria de Mendoza (Iscamen), Alejandro Molero explicó: “el primer insumo que se va a adquirir por medio de una licitación pública son los isofuros de feromonas para cubrir una superficie de 15 mil hectáreas; para ello se contará con un presupuesto de $ 120 millones de pesos que serán aportados por la provincia”. La primera etapa de la licitación, en curso, abrirá sobres el 7 de setiembre, mientras que para convocar a la segunda fase Mendoza adelantará $ 80 millones correspondiente al aportes de los productores.
La apertura de sobres para la compra del segundo insumo, insecticidas de aplicación terrestre y aérea, está programada para los primeros días de octubre. Los $ 80 millones con los que se comprarán los químicos surgirán de los aportes que realizan los productores con más de 10 hectáreas de cultivo. El monto será adelantado por la provincia y lo recuperará a mediados del próximo año. Para la tercera etapa, se requerirá fondos cercanos a los $ 300 millones, dinero que sería aportado por Nación aunque aún o existe comunicación formal al respecto.
“Los fondos al gobierno nacional se están gestionando desde el ministerio de economía de la provincia desde principios de año. Pero aún no se ha recibido una notificación formal desde la Nación y todo lo que se ha dicho es en base a trascendidos. Hay una ley -de 2016- que dispone que el Gobierno nacional debe aportar los fondos para la lucha contra la lobesia, en su primer año así lo hizo aportando la totalidad del dinero para la campaña”, agregó Molero. El funcionario conto que en los años subsiguientes la Nación redujo primero a la mitad, luego a tres cuartos del total de los aportas y por último, el ao pasado, ya no giró fondos.
“Si bien tenemos controlada la plaga queremos avanza en la erradicación definitiva de la polilla de la vid. El año pasado se realizaron trabajos de mantenimiento y queríamos profundizar lo hecho para avanzar en la erradicación de la plaga. Para lograr estar más cerca de este objetivo deberíamos contar esta campaña con fondos cercanos a los $ 650 millones”, destacó Molero. Los costos de algunos insumos están atados al tipo de cambio y las variaciones del tipo de cambio impactan directamente sobre el valor de la presente campaña.
En noviembre de 2016 fue sancionada la Ley 27.227, a través de la cual se estableció que el Senasa debía proveer los difusores de feromonas (o su equivalente en plata) a los productores vitivinícolas afectados por la Lobesia Botrana durante cuatro temporadas. La normativa nunca fue reglamentada, pero aun así, el Gobierno comenzó a financiar parte de la campaña.
El aporte del Estado Nacional fue disminuyendo año tras año, lo que obligó al Gobierno provincial a buscar alternativas para completar el presupuesto necesario. Por eso, a partir de la temporada 2018-2019 el financiamiento de la campaña se dividió en tres partes: el aporte de la Nación, un aporte del Gobierno de Mendoza y una cooperación por parte de los productores de más de diez hectáreas, que fueron gravados con la Contribución Obligatoria Especial (COE) de $ 1.500 por hectárea.
En enero, el Ministro de Economía de Mendoza, Enrique Vaquié, envió una carta al Ministro de Agricultura de la Nación, Luis Baterra, solicitando que destine una partida de $ 400 millones para atender los gastos que demanda el programa de erradicación de la polilla de la vid en la provincia. Monto que junto al aporte que destinaría la provincia y la contribución de los productores, alcanzaría para enfrentar una campaña de mínima intensidad. Había trascendido que Basterra otorgaría una partida de $ 390 millones para repartir entre San Juan y Mendoza.
El pasado 22 de mayo, representantes vitivinícolas presentaron a las autoridades de la Nación una agenda de temas estratégicos, entre ellos la lucha contra la lobesia botrana (planteando la necesidad de los fondos para afrontar una nueva campaña de combate) y la crisis hídrica. Además se solicitó un canal de diálogo directo para construir una agenda común de trabajo. En la videoconferencia con Basterra, participaron miembros de la Coviar, INV, INTA y el ministro Enrique Vaquié.
