Industrias ya clásicas, otras en cambio generacional y otras emergentes comparten desafíos similares: ser sostenibles en el tiempo, impactar en el entorno socio-ambiental de manera positiva y desarrollar e innovar permanentemente para poder ser competitivas.
Chirca OVC SA brinda productos y servicios para la industria vitivinícola, de alimentación y bebidas con gran cobertura de nuestro país.
El aporte al ecosistema industrial no solo se evidencia en su compromiso con gran parte de la cadena de valor de la producción, sino que también ha brindado en estos ya 44 años de existencia un ejemplo de valores para seguir.
La empresa familiar fue fundada en 1978 en Mendoza por el Ingeniero Octavio Viorel Chirca. En un principio estableció sus oficinas y depósitos en el Gran Mendoza, para luego abrir sucursales en San Rafael, y las provincias de Buenos Aires y San Juan.
Años de expansión de la empresa familiar llevaron a dar ingreso a la segunda generación, Juan, Alexia y Anahí Chirca, quienes dieron una impronta de innovación manteniendo la cultura de trabajo y compromiso de OVC SA, que es ya referente en el sector productivo.
En 2018 Chirca certificó normas ISO 9001 2015. A principios de este año la empresa mudó sus oficinas, depósito y planta logística a una nueva sede en Luján de Cuyo, estableciendo un hito más en su historial de crecimiento.
Actualmente la industria demanda, más que productos de calidad, productos que tengan asociados sus procesos, certificaciones y cultura de trabajo con la cuál verse reflejados. Esto, sumado a los avances en innovación, tecnología y adaptabilidad a los nuevos escenarios.
Hoy tanto clientes como proveedores realizan una tarea fina respecto a una trazabilidad controlada del producto, para conocer el porqué de la elección de un producto y su incidencia directa en el producto final.
Chirca cumplió este año 44 años, potenciando industrias y bodegas desde sus procesos. Hay mucho camino por recorrer y estar a la altura de las circunstancias es un mandato de la empresa.