El gobernador de Catamarca, Raúl Jalíl, pidió hoy a la Cámara de Diputados que no legisle sobre la Ley de Humedales sin antes de conocer cada zona del país porque podrían afectar industrias como la del litio, que recién está naciendo en el país.
Jalíl habló en el congreso Democracia y Desarrollo organizado por Clarín en Buenos Aires. Lo hizo desde Estados Unidos, a donde viajó junto a otros nueve mandatarios y el ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro para buscar inversiones.
A la derecha de Jalíl estaban sentados el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, y el de Salta, Gustavo Sáenz. El catamarqueño dijo que los tres comparten la misma preocupación por la iniciativa que avanza en el Congreso.
Con inversiones de Estados Unidos, Corea del Sur, Australia y China, las tres provincias se están convirtiendo en el principal polo de producción y exportación de litio del país y el segundo de América Latina.
“Ahora se está discutiendo la ley de Humedales en la Cámara de Diputados, en Buenos Aires. Coincidimos los tres gobernadores que no hay que discutir si no se conoce la zona. Por eso invitamos a las comisiones que conozcan”, dijo Jalíl.
Al referirse a la Ley de Humedales, comentó: “No se puede legislar desde el desconocimiento”. Y contó una historia: “En 1890 Catamarca tenía una industria de agua ardiente y Pellegrini le puso un impuesto del 45% a ese producto y hoy no tenemos esa industria. Solo quedó la historia”, lamentó.
El gobernador de Catamarca dijo que todo proyecto tiene que tener en cuenta tres impactos distintos. El primero es el ambiental, para lo cual en el cual Catamarca, Jujuy y Salta “cuentan con una policía ambiental seria”.
El segundo es el económico. Por ejemplo, Catamarca nunca ha tenido tantas inversiones y regalías por la actividad minera. “Pasaremos de 100 millones de dólares de exportación a 3.000 millones de dólares”, dijo Jalíl.
Y, en tercer lugar, señaló que se debe tener en cuenta la necesidad de tener una matriz tributaria acorde a las inversiones que necesitan los distintos sectores de la economía.
“No nos podemos exceder en la presión tributaria sobre las empresas. De última, si hay ganancias extraordinarias, se puede discutir a través del diálogo. Pero la matriz tributaria tiene que estar en coincidencia con lo que pueden pagar las empresas”, dijo el mandatario catamarqueño.