Mendoza sigue sumando producción hidrocarburífera, empleo y recaudación en concepto de regalías: luego de que la Empresa Mendocina de Energía (Emesa) y Hattrick Energy declararon la comercialidad sobre la totalidad de la superficie de Linero de Piedra y solicitaran la explotación por 25 años, presentaron un plan anual que preveía una perforación en 2023.
La marcha de los trabajos ha superado todas las expectativas y la unión transitoria de empresas adelanta la actividad: se dispone a perforar su quinto pozo, lo que quintuplica el plan inicial y augura excelentes resultados para la provincia en un sector clave como es el crudo pesado. Esto se suma al piloto exploratorio que lleva adelante YPF del lado mendocino de la formación Vaca Muerta, que permitirá conocer el potencial productivo de no convencional, con una inversión de U$D 17 millones.
“Adelantar la actividad mueve la cadena productiva. Mendoza va a tener mayor producción y va a recaudar más en concepto de regalías”, afirmó el director de Hidrocarburos del Ministerio de Economía y Energía, Estanislao Schilardi. “El crudo pesado va a desempeñar un rol muy importante en la industria petrolera”, recordó.
Extensión y desarrollo
Emesa y Hattrick Energy declararon la comercialidad sobre la totalidad de la superficie de Lindero de Piedra en abril de este año y solicitaron la explotación por 25 años, en lo que significa una nueva área petrolera para la provincia: el área 43.
La empresa estatal de energía, investigación y asesoramiento Emesa ya había realizado trabajos exploratorios con Hattrick y el resultado final dio cuenta de “descubrimientos” que permiten proyectar un trabajo a 25 años.
La inversión total de estos trabajos será de U$D 27,3 millones, que incluyen la perforación de 27 nuevos pozos de desarrollo y la contratación de mano de obra e insumos locales.
De hecho, el decreto que otorga la concesión a la UT Lindero de Piedra, conformada 90% por Hattrick Energy SAS y 10% por Emesa, detalla que en todas las contrataciones se deberá emplear como mínimo 75 % de mano de obra, servicios e insumos mendocinos.
Con estas acciones, el Gobierno de Mendoza logró revertir la tendencia a la baja que se acentuó con la pandemia de 2020 y atraer inversiones con políticas activas: en 2021 aumentaron 32%, y 2022 cerró con una suba de 80% con respecto a 2021.
En 2022, se pusieron en marcha en la provincia proyectos por U$S 301 millones, con labores de upstream, construcción y mantenimiento de infraestructuras e instalaciones de superficie, como plantas de tratamiento de crudo, tanques, oleoductos, plantas de tratamiento de agua, instalaciones de inyección de agua o instalaciones de producción de gas.