Los alquileres que deban actualizarse este mes y que fueron firmados con la ley de 2020 (27.551) tendrán un ajuste del 244,4%. Esto implica que si el monto que venía pagando el inquilino era de $100.000, hasta junio del año que viene deberá pagar $ 344.396. El incremento surge de aplicar el Índice de Contratos de Locación (ICL), que publica el Banco Central.
Aunque la ley de alquileres fue derogada por el presidente Javier Milei en diciembre de 2023, lo cierto es que habrá contratos encuadrados en la que se aprobó en 2020 hasta octubre de 2026, ya que la vigencia de los acuerdos en el marco de esa normativa era de tres años. También preveía que la actualización del importe se realizara una vez al año, en función del ICL, que toma en partes iguales la evolución del IPC (inflación) y del Ripte (salarios).
El 17 de octubre del año pasado entró en vigor, por un breve lapso, la ley 27.737, que mantuvo la duración de los contratos en tres años, pero estableció una actualización semestral, en función del Índice de Casa Propia. Esto implica que el ajuste se hará en función del CVS (Coeficiente de Variación Salarial), pero sólo tomará el 90% de éste.
Como esta ley se aplicó entre el 17 de octubre y el 20 de diciembre, cuando el DNU de Milei la derogó, y las actualizaciones se realizan cada seis meses, en julio no habría variación para ninguno de estos contratos.
En cambio, sí recibirían aumento algunos de los inquilinos que firmaron en 2024. Como se volvió al “libre acuerdo entre las partes”, hay algunos que optaron por actualizaciones semestrales, cuatrimestrales y trimestrales, tomando como referencia el ICL o el IPC. Pero si se tiene en cuenta que, según los corredores públicos inmobiliarios, lo más habitual es que se definan subas cuatrimestrales según el ICL, quienes acordaron en marzo tendrán una suba del 71,07% en julio.