Los salarios subieron 3,8% en términos nominales durante enero, según informó el INDEC este jueves. De esta manera, los ingresos de los trabajadores perdieron por segundo mes consecutivo contra la inflación, la cual dio 3,9% en el comienzo del año.
Los que sí crecieron en términos reales fueron los sueldos en el sector privado formal, que ascendieron un 4,6% según los datos oficiales.
Esto se dio a raíz de varios aumentos correspondientes a cuotas paritarias, como los verificados en los gremios de aceiteros, carne, cuero, gastronómicos, gráficos, indumentaria, maestranza, metalúrgicos, químicos y seguridad.
Paralelamente, los salarios de los empleados públicos tuvieron un alza de apenas 2,9%. En conjunto, los trabajadores registrados percibieron una mejora salarial del 4%, apenas superior a la inflación del período.
Por su parte, los informales fueron los más perjudicados ya que el INDEC registró en este segmento un ajuste de 2,5%. Vale remarcar que este dato cuenta con un importante rezago debido a las dificultades para relevar con precisión lo que sucede con el empleo no registrado.
En términos anuales, los sueldos mostraron un repunte real ya que aumentaron 54,1%, contra una inflación del 50,7% en el mismo período.
Panorama complejo para los próximo meses
En comparación con enero de 2021, los ingresos que más se recuperaron fueron los del sector público (59,4%), seguidos de los del sector privado formal (56,2%). Muy rezagados quedaron los ingresos de los trabajadores informales, que percibieron un aumento interanual de 40,7%.
A medidos de este mes, el Gobierno nacional anunció un aumento del 45% del Salario Mínimo, Vital y Móvil, que se instrumentará en cuatro tramos y llegará a fin de año a los $47.850. Este aumento incluye la posibilidad de solicitar una revisión total a partir de agosto, según acordaron sindicalistas y empresarios bajo la supervisión del Ministerio de Trabajo.
Sin embargo, a pesar de estas medidas, para los próximos meses es de esperar un retroceso en el proceso de recuperación del poder adquisitivo debido al salto inflacionario, que no es acompañado en lo inmediato por los reacomodamientos en la mayoría de las paritarias, detalla Ámbito.
Además, el contexto de elevada inflación a nivel mundial se suma a una inercia ya preocupante de la dinámica de precios en Argentina, y a posibles aceleraciones en tarifas en el marco del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Frente a ese escenario, el aumento promedio de los precios esperado para 2022 se acerca cada vez más al 60%, mientras que las primeras paritarias se cerraron en torno al 45%/48% anual.