Es la mediatarde cuando Luis Pierrini, presidente y gerente general de Triunfo Seguros, recibe a Los Andes en su oficina de calle Emilio Civit. Es un ambiente iluminado, con el encanto de las casas antiguas de esa zona, y entre los pocos adornos sobresale una silueta con un corazón y la palabra Mendoza, como el cartel de la Plaza Independencia donde turistas hoy se toman fotos.
El detalle se vincula con el hecho de ser una empresa que (nacida oficialmente en Córdoba), por más de 55 años se viene desarrollando en Mendoza y que hoy tiene más de 500 oficinas en todas las provincias del país. De eso, de los desafíos del mercado asegurador y de la situación económica actual habló Pierrini en este encuentro.
- Con un fuerte desarrollo en Mendoza, ¿cómo logró Triunfo Seguros posicionarse a nivel nacional?
- Triunfo seguros nació en 1967 en Córdoba, pero al año se trasladó a Mendoza y se radicó definitivamente acá. Mis padres fueron los fundadores, yo terminé tomando control de la compañía hace 18 años.
En un principio, Triunfo trataba de no salirse de Cuyo y un poquito en Córdoba. Pero hace 15 o 16 años, cuando la compañía estaba muy bien, firme y sólida, iniciamos un proceso de expansión para cubrir todo el territorio nacional.
Uno no puede sólo decir “Voy ya y me instalo en Neuquén”, sino que implica una estrategia, un plan de negocio, porque antes de vender una póliza tenés que tener coberturas de todo, desde grúas y talleres hasta proveedores y abogados. Hoy el objetivo está cumplido con oficinas en todas las provincias
- Siendo un mercado bastante competitivo, ¿qué diferencial decidieron ofrecer?
- Triunfo cumple. Eso es lo primero y principal, cumplir los compromisos asumidos al contratar una póliza. Cada uno de nuestros productores asociados de seguros (PAS) o asesores de seguros integran una red que alimentan la venta de Triunfo, la empresa casi no tiene venta directa sino que lo hace a través de productores. El cliente conoce la marca, compara precio y compra Triunfo.
Detrás de cada región, también hay productores, asesores que intervienen en la venta. No solo estamos en todas las provincias, sino que tenemos 550 oficinas, no solo en las capitales provinciales sino en el interior de ellas. Ese fue el proceso que se propuso Triunfo con proveedores, prestadores, PAS, buenos productos y estando cerca de la gente, ya sea que tengan un granizo, un robo o cualquier problema.
- Ya que menciona el granizo, suele ser un tema recurrente al inicio de cada año. ¿Cómo estuvo esta vez?
- Desde fines de octubre hasta marzo solemos tener problemas por granizo. Cubrimos desde el daño en autos o techos de las casas hasta el de la producción agrícola de frutales y viñedos. El granizo en esta temporada ha sido fuerte, no tanto como el año pasado en zonas urbanas, pero sí en la zona agrícola.
Vale decir que Mendoza fue la primera provincia del país en tener un seguro agrícola de toda la superficie provincial por riesgo climático, con un pool de compañías aseguradoras, pero hace dos años la provincia dejó de contratarlo. Otras provincias copiaron ese modelo y todavía lo tienen vigente.
Creo que Mendoza debería tenerlo, con aseguradores, el Banco Nación o con quien sea. Se incluían todos los productores anotados en el Registro permanente del Uso de la Tierra (RUT), eso los motivaba a blanquear su situación. La póliza es una base contra las pérdidas por contingencias, junto con la malla antigranizo y el combate aéreo.
Un panorama nacional inseguro
- ¿Cómo compiten contra otras empresas nacionales e incluso internacionales?
- Peleamos con empresas internacionales enormes, con presupuestos ilimitados. Creo que lo primero para marcar una diferencia es estar. No hay oficina de Triunfo en el país que yo no conozca, hago dos recorridas al año en las provincias, más allá de visitar a menudo Córdoba, Rosario y Buenos Aires.
Eso es muy importante en esta actividad, estar cerca de la gente, sea en Mendoza o en Tierra del Fuego, a más de 2.000 km de distancia. Quien presta servicios o vende para nuestra empresa le conoce la cara a quienes manejamos la compañía, cosa que no pasa en una multinacional. En este rubro, la confianza es clave.
- Estas dificultades de competir, ¿cómo se conjugan con los problemas económicos nacionales?
- En principio, la macroeconomía mundial es un problema, después de la pandemia todo el planeta se ralentizó, hay demanda y espera de autos, de televisores, etcétera. Además, se sumó la distorsión en los precios de la energía por la guerra entre Rusia y Ucrania. Todo eso termina repercutiendo en Argentina.
Y después tenemos problemas domésticos, con una inflación alta, una economía de importación bastante cerrada. Si me preguntan qué número tuvimos, la inflación 2022 del mercado asegurador fue 20 puntos mayor que la general, por lo menos, es decir 120 o 125%. Porque a la inflación local hay que agregar las tasas de justicia, que aumentaron más que el índice general de precios, y los repuestos se encarecían más por falta de oferta, no olvidemos los problemas de falta de cubiertas del año pasado.
Hoy a un vehículo importado es muy difícil cambiarle las piezas, lamentablemente hay esperas de meses por los repuestos. Entonces, la macroeconomía mundial, la suba de precios en Argentina y la falta de repuestos son fuertes desafíos, ya nos aumentaron la inflación en 2022.
- Más allá del tema de inflación, ¿qué otros desafíos ven en el sector?
- La inflación sin duda es el primero y el más difícil. Segundo viene la judicialidad, en parte provocada por la inflación porque tenés alguien que aseguró el auto por $3 millones y cuando le robaron el auto valía $5 millones. No se acuerda el pago y se va muy rápido a la judicialidad. Se han judicializado mucho más los reclamos y al final perdemos plata las dos partes.
Tercero, yo creo que la inseguridad que estamos viendo en Rosario o en Buenos Aires se repite en otros lugares, y es muy preocupante. Es más problemático aún cuando afecta a un vehículo que tenga, por ejemplo, llantas o cubiertas mexicanas, porque hay que ver si de casualidad justo hay de esas o quedás en lista de espera.
- Y por el otro lado, ¿qué sí ven de positivo y los motiva a seguir en la actividad?
- Somos argentinos. Nos gusta la actividad, a mi familia y a quienes trabajan en la compañía. Cada día hay un desafío nuevo, siempre un tema distinto que analizar. Creo que todos queremos que este país se recupere, que esta economía se actualice.
Generamos cobertura, confianza y empleo, hoy Triunfo tiene más de 650 empleados de forma directa y más de 3.000 productores en sus canales de venta, sin contar proveedores. Estamos entre las 15 empresas más importantes en un mercado asegurador nacional con más de 100 empresas. Todo esto motiva a seguir.
Perfil de Luis Pierrini
Hijo de Roberto Pierrini, fundador de Triunfo Seguros, Luis tomó las riendas de la empresa a finales de 2004, en un sector donde se desempeñaba desde hace tiempo (incluso, hizo la carrera de Administración de Empresas de Seguros). Actualmente, con 53 años, también es padre de dos hijas.
Aún cuando la empresa tiene alcance nacional sigue eligiendo Mendoza para invertir, porque es la tierra donde creció la empresa y que eligen él y su familia para vivir. “Y seguimos apostando por Mendoza”, afirma convencido.
En cuanto a la provincia, más allá de sus paisajes, destacó que tiene dirigentes de todos los colores “de muy buena calidad y alto prestigio”. Además, asegura que la matriz productiva tiene un alto potencial más allá de sectores fuertes como la vitivinicultura o el turismo.