Esta semana se comenzó a pagar la segunda etapa del Ingreso Familia de Emergencia (IFE) en Mendoza, aunque aún resta completar el pago de una pequeña parte de quienes se inscribieron para cobrar en abril. Las demoras se deben a que su situación debió ser revisada o corregida por el organismo.
El número de beneficiarios en la provincia ronda los 330 mil, y de entre ellos, 105.998 conforman el universo de quienes cobran el beneficio atado a un plan social de Asignación Universal por Hijo o Embarazo.
“La primera etapa todavía no se termina de pagar. Se está cancelando el remanente, porque hubo que actualizar algunos datos”, informó Carlos Gallo, titular de Anses, regional Cuyo.
Según explicó, hubo personas que pusieron un mismo número de celular o mail para dos beneficios distintos, y seleccionaron la opción de cobro por red link. Esta situación podía dar lugar a fraudes. De hecho se confirmó un caso de que un salario de un mendocino quiso ser cobrado en otra provincia.
“No era difícil que alguien intentara cobrar a nombre de otra persona, solo con tener su número de DNI. Por eso el sistema no lo bloqueó por seguridad, y se le avisó al titular verdadero que el pago estaría disponible para retirarlo por el Correo Argentino”, completó Gallo. Esos remanentes, que conforman un universo pequeño de beneficiarios, son los que se están terminando de pagar por estos días.
Pagos fluidos
En una primera etapa, el sistema acusó errores que le impidieron el acceso a potenciales beneficiarios, tales como padres e hijos que habían sido cargados como cónyuges, o personas con fechas de nacimiento superiores a la expectativa de vida de un ser humano. Todo esto se corrigió a través de la oficina virtual, por lo que el trámite será más sencillo a partir de ahora.
“Es difícil separar el universo entre desempleados y personas que no trabajan porque se dedican a tareas del hogar, aunque también se considera que trabajan, o personas que están empleadas en negro. En general, todos ellos realizan alguna labor no remunerada y por ello fueron incluidos en el IFE”, explicó Gallo, al respecto.
Finalmente, el funcionario explicó que el pago del Ingreso Familiar de Emergencia por $10.000 se pensó como un beneficio extraordinario (por única vez), aunque dada la extensión de las medidas para evitar la propagación del virus, se agregó una segunda etapa. No obstante, durante los meses de cuarentena se logró actualizar una base de datos con 3 millones de personas que debieron ser alcanzados por la seguridad social, y toda esa información estará disponible, ya sea para extender el pago del IFE, o para generar planes que alcancen a todos los ciudadanos vulnerables en el futuro. En paralelo, quienes no tienen cuenta bancaria, podrán acceder a una, y de esa forma, se podrá avanzar en la integración al sistema formal de muchos ciudadanos.