Para terminar de despejar la incertidumbre financiera previo a las elecciones PASO, el ministro de Economía, Sergio Massa, aún debe conseguir U$S 760 millones para cancelar el próximo viernes un nuevo vencimiento con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que en este caso no puede ser postergado.
Con el objetivo de influir en los mercados, una hora antes de la apertura de las operaciones de este lunes Massa emitió un mensaje en el que confirmó el pago de U$S 2.700 millones al FMI y las fuentes financieras que utilizó, pero sin dar precisiones sobre el segundo vencimiento a afrontar en pocos días.
“Quiero llevarles tranquilidad”, empezó diciendo Massa luego de haber soportado durante la semana pasada un nuevo rally alcista del dólar informal que lo llevó a los $ 551.
El jefe del Palacio de Hacienda precisó que los U$S 2.700 millones se pagan mediante dos préstamos: uno del Banco de Desarrollo Latinoamericano (ex CAF) por U$S 1.000 millones y otro proveniente del segundo tramo del swap por China por el equivalente a U$S 1.700 millones.
Massa destacó la importancia del crédito del banco regional, aunque le trajo un dolor de cabeza: de los 21 países miembros, 20 votaron a favor con excepción de Perú que así se cobró una deuda con la Argentina que no apoyó a su candidato en la votación del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Acerca de la porción a cancelar con yuanes, Massa indicó que se envían “directamente desde la cuenta del segundo tramo swap de Argentina con China al FMI”.
Aunque ya sabía que el mercado tenía incorporado en sus precios los parámetros con los que finalmente se llegó al acuerdo, Massa buscó una imagen de campaña haciendo una puesta en escena sobre el cuidado de las reservas, pero sin despejar todas las dudas.
“Quería transmitírselos entendiendo que esto es una enorme tranquilidad a la hora de mirar el funcionamiento de los mercados argentinos y el cuidado de nuestras reservas que hace a la fortaleza de nuestra economía y de nuestra moneda”, se justificó el ministro.
El viernes Argentina tiene que abonarle otro vencimiento al FMI en este caso de U$S 756 millones correspondiente a intereses del préstamo original a Mauricio Macri y no puede ser postergado dado que sólo se admite la prórroga de obligaciones de capital.
“Los pagos de cargos (intereses) no se pueden agrupar, pero esperamos que las autoridades continúen al día con sus obligaciones financieras con el Fondo, incluso en agosto”, afirmó un portavoz del FMI ante una consulta de este medio.
Desde el Palacio de Hacienda admitieron que aún tienen que resolver este pago y que la forma en que se cancelará se comunicará sobre la fecha.
A este vencimiento deben sumarse otros U$S 69 millones que se le deberán abonar durante el mes a otros organismos multilaterales como el BID, la CAF y el Banco Mundial.
Luego las obligaciones restantes con el FMI son las siguientes: 21 de septiembre U$S 923 millones en amortización de capital; 30 de octubre U$S 2.652 millones en amortización de capital; 30 de noviembre U$S 830 millones de intereses, y el 31 de diciembre U$S 923 millones en amortización de capital.
Massa confirmó además que el desembolso de U$S 7.500 millones será girado entre el 17 y el 21 de agosto y de esta forma estarían cubiertas las obligaciones hasta octubre.
En este escenario, el dólar blue que había insinuado una leve baja en el inicio de las operaciones, culminó en $ 550, un rango similar al cierre del último viernes. De esta forma, en julio la divisa informal aumentó 11%.
La devaluación oficial fue de 0,47% y la cotización pasó a $ 287,92, quedando la brecha en el 91%. En el mes la depreciación del dólar oficial fue de 7%, variación que podría quedar debajo de la inflación.
En tanto, el dólar MEP avanzó $ 516,65 y el Contado con Liquidación a $ 543,31. En ambos casos, la intervención –ahora autorizada por el FMI- jugó un rol central para contener las subas.
Donde se observó una mayor inquietud fue en el mercado de Futuros donde el dólar oficial cotizó a $ 540 para diciembre, descontando una fuerte devaluación con la asunción del próximo gobierno.
Por su parte, el Banco Central pudo adquirir hoy U$S 220 millones, vendió 309 millones en yuanes, con un saldo final favorable en U$ 177 millones. De esta forma, en julio acumuló compras por U$S 820 millones y venta de yuanes por 8.624 millones.
El dólar agro aportó hoy U$S 118 millones y en sólo seis jornadas ya sumó U$S 1.000 millones, la mitad del objetivo de U$S 2.000 millones.
En tanto, a favor de una mejora en los bonos soberanos, el riesgo país perforó el piso de los 2.000 puntos básicos y quedó en 1.985 puntos.