La producción de neumáticos en las tres plantas de las empresas Fate, Pirelli y Bridgestone en Buenos Aires está paralizada debido al conflicto salarial entre las compañías, que ofrecieron un aumento salarial de 38% por nueve meses, y el Sindicato Único de Trabajadores del Neumático (Sutna), que este lunes ratificó la huelga tras no llegar a un acuerdo entre las partes.
En la audiencia convocada para este lunes en el Ministerio de Trabajo no hubo acuerdo. Participaron representantes de ambas partes, y la reunión fallida hace que se prolongue el paro con bloqueos a las plantas.
Luego de cinco horas de negociaciones en la cartera de Trabajo, se pasó a un cuarto intermedio hasta el miércoles próximo a la mañana. Así, en medio de un clima de tensión, el gremio continuará con el paro y el acampe que mantiene en las plantas de Fate, Pirelli y Bridgestone, cuya actividad está paralizada desde el jueves pasado. El miércoles volverán a movilizarse cómo este lunes junto a comisiones internas combativas y el Polo Obrero.
Las tratativas volvieron a fracasar en la audiencia de este lunes, que comenzó a las 11 y se extendió hasta casi las 16. La complejidad de las conversaciones quedaron reflejadas en una foto: la conducción sindical encabezada por Alejandro Crespo y los representantes de las empresas mantuvieron reuniones por separado con el equipo de Claudio Moroni, sin verse las caras en ningún momento.
Un conflicto largo y difícil
El conflicto salarial lleva casi cinco meses. El sindicato que conduce Alejandro Crespo venía haciendo paros intermitentes que duraban entre 24 y 72 horas desde mayo, pero en la última semana el conflicto se profundizó con la propuesta salarial realizada por las compañías para la paritaria 2022/2023.
Hasta la semana pasada, el sindicato y las tres compañías intentaban acercar posiciones para darle un cierre a la paritaria 2021/2022, con un ajuste que llevara los salarios a no perder contra la inflación. Hasta ese momento, dijo Crespo en Radio Con Vos, el incremento salarial había sido del 50%.
Según Crespo, las empresas intentaron la semana pasada cerrar unilateralmente la paritaria 2021/2022 y dar comienzo a la paritaria 2022/2023. Esto fue considerado como “muy provocador” por el Sutna, que decidió profundizar su plan de lucha para conseguir una propuesta que se acerque a sus pretensiones.
“Lo que está pasando es sencillo. Estamos pidiendo un aumento salarial real, dado que las fábricas están en un momento económico muy favorable”, comentó Crespo al señalar que el reclamo es que la paritaria 2021/2022 sea reajustada hasta superar la inflación del 71% anual (julio-julio), para luego recién comenzar con la nueva discusión.
El Sutna además pide que los trabajadores de las tres plantas cobren un adicional del 15% sobre el salario neto porque trabajan todos los fines de semana y tienen horarios rotativos. “Un compañero cobra 475 pesos la hora en Pirelli y uno en Fate cobra 605 pesos la hora”, dijo el sindicalista.
En medio del conflicto, la fabricante de neumáticos Bridgestone cerró “temporalmente” sus operaciones en la Argentina, según informó el sábado. Y las plantas de Pirelli y Fate siguen paralizadas. Por ello, en el país no se están produciendo las 500.000 cubiertas que salen a la calle mes a mes.
Crespo consideró que las empresas están en un “muy buen momento” porque compran la materia prima a dólar oficial y venden las cubiertas “al precio internacional dentro y fuera del país”. En el Sutna estiman que los precios están ajustados a los tipos de cambio alternativos (MEP y CCL) y no al oficial mayorista.
El reclamo de los trabajadores empezó con acciones medidas hace cuatro meses, con un paro por semana. “Esto se profundizó porque (las empresas) durante 22 audiencias tuvieron la misma posición. No movieron una coma de la propuesta inicial. Esto generó una situación de intransigencia. Y derivó en una negociación fuera del carácter de la buena fe”, dijo Crespo.
Esa situación generó que los representantes del gremio decidieran quedarse la semana pasada en la sala de reuniones del ministerio de Trabajo, en la sede de Callao al 100, hasta que las empresas trajeran una nueva oferta. En los hechos, significó una toma de parte del edificio de la cartera laboral nacional que conduce Claudio Moroni.
“Para ser claros: nos ofrecieron 38% de aumento desde julio de 2022 hasta julio de 2023, con una revisión a los nueve meses (en marzo). La presión inflacionaria proyectada está cerca de los 100 puntos”, se quejó Crespo y rechazó que el trasfondo del conflicto esté dado por un presunto interés del Sutna de que las plantas pasen a manos de cooperativas.
El sindicalista dijo que el aumento acumulado en los últimos doce meses fue del 50%, con lo que los sueldos promedio llegaron a ubicarse entre 120.000 y 130.000 pesos en mano, contando el trabajo realizado en turnos rotativos de día y de noche y los fines de semana, incluyendo los domingos.
Crespo dijo que el convenio colectivo del sector está “fraccionado por fábrica” desde hace muchos años, antes que él pasara a conducir el Sutna. En ese sentido, señaló que solo la empresa Bridgestone paga el bono anual a los trabajadores, aunque tampoco lo hace en forma habitual. “Lo tuvieron que pagar ahora por las ganancias que registraron”, dijo.
Ese bono anual nació en el 2001 cuando en una negociación, los operarios aceptaron el bono a cambio de una rebaja salarial del 40% a cambio de que no hubiera despidos en la planta ubicada en la localidad bonaerense de Llavallol. Según Crespo, la firma lo pagó este año después de “muchísimos años sin abonarlo”.
Crespo dijo que fue el Sutna el que convocó a un paro total de actividades hasta que las empresas hagan una oferta salarial que mejore lo ya presentado, por lo que consideró que el desabastecimiento de cubiertas que se generará será por “responsabilidad de las empresas”.
