El presidente del Banco Central de la República Argentina, Miguel Pesce, aseguró este viernes que la nueva estrategia devaluatoria apunta a desalentar “acciones especulativas” en medio de las tensiones cambiarias que provocan una sangría de las reservas internacionales.
“Es lo que hicimos para que no haya sorpresa, sobresaltos ni malas noticias, con una noticia que es puramente técnica sobre cómo el Banco Central maneja el paso devaluatorio”, dijo Pesce.
Justificó así la decisión de la autoridad monetaria de “abandonar el mecanismo de devaluación uniforme, otorgando mayor volatilidad y manteniendo el nivel competitivo del tipo de cambio real multilateral”.
En el marco de la batería de medidas que anunció la Casa Rosada para acceder a más dólares, el Central informó que a partir de este viernes “el ritmo de depreciación diario se adecuará en forma gradual a las necesidades de la coyuntura”.
Al respecto, Pesce explicó que decidió anticipar en la víspera que la postura compradora del Central será este viernes de $ 76,95 por dólar, 70 centavos por sobre el cierre que tuvo la divisa en la sesión anterior, para “dar previsibilidad”.
“Lo que advertimos al mercado, porque nos gusta tener previsibilidad, es que hasta ahora veníamos teniendo una devaluación constante, día por día, y a partir de ahora esa constante no va a ser así, vamos a dar cierta volatilidad al tipo de cambio, pero como va a tener un salto importante en el día de hoy, no queríamos que se interpretara como que a partir de ahora ese es el nuevo paso devaluatorio”, indicó.
Seguido, Pesce remarcó que, con el nuevo esquema, “lo que se gana es que algunas acciones especulativas pierdan relevancia, son cuestiones técnicas sobre cómo se manejan las mesas de dinero”.
“Ahí hay presiones especialmente de sectores especulativos, especialmente de los head founds que quedaron atrapados en títulos en la Argentina cuando intentaron hacer carry trade durante la gestión de (Mauricio) Macri. Luego Macri sobre el cierre de su mandato les prohibió el acceso al mercado de cambio, estos actores generan maniobras especulativas que ponen presión sobre los tipos de cambio de referencia que no operan en el mercado oficial”, amplió.