Desde diversas entidades vienen advirtiendo sobre la preocupante caída en las ventas y el impacto que esto tiene en la supervivencia, sobre todo, de los comercios minoristas. Sin embargo, en algunos municipios del Gran Mendoza las aperturas en lo que va de 2024 todavía superan a los cierres. Y desde el sector inmobiliario aseguran que casi no hay oferta de locales en alquiler, al menos en las calles con mayor circulación.
El relevamiento de la CAME (Confederación Argentina de la Mediana Empresa) muestra que, en julio, las ventas minoristas tuvieron una retracción del 15,7% en comparación con el mismo mes de 2023. Desde enero a julio, el descenso acumulado es del 17%. “Las pymes están intentando mantenerse a flote en un contexto económico financiero muy complejo”, plantean.
De hecho, los siete rubros relevados tuvieron caídas interanuales en sus ventas en el séptimo mes del año y sólo uno -Textil e indumentaria- presenta un leve incremento (3,7%) en el acumulado de 2024. El resto tiene variaciones negativas, que alcanzan el -32,5% en el caso de Perfumería y el -29,2% en Farmacia. Si bien se trata de datos nacionales, los comercios mendocinos participan de este relevamiento.
Esto parece contrastar con las cifras que brindan desde algunos municipios, aunque tal vez la clave esté en la descripción que utilizan desde CAME: “están intentando mantenerse a flote”. Desde las mismas comunas reconocen que varios comerciantes les han planteado que no saben por cuánto tiempo más podrán sostenerse.
Pese a esto, en Capital, entre enero y julio, han recibido un total de 587 solicitudes de alta de comercios, frente a 230 pedidos de baja, lo que arroja un saldo positivo de 357. Desde el municipio indicaron que el mayor repunte de nuevos negocios comenzó en abril.
Yamila Meljim, secretaria de Desarrollo Económico de la Ciudad, resaltó que las bajas se van compensando con las altas, pero también indicó que, en ciertos casos, estas subas responden a que un comercio suma un nuevo rubro. Por ejemplo, una peluquería incorpora la venta de indumentaria o en un café destinan una parte del local a la comercialización de otros productos, para complementar ingresos.
La funcionaria detalló que, cuando esto pasa, queda registrado como un alta, porque suman una nueva actividad, aunque sea en el mismo comercio. Pero resaltó que también implica la posibilidad de más empleo y de mayor desarrollo para el departamento, porque demandan nuevos proveedores.
En cuanto a la evolución de los rubros, indicó que el que más ha caído es Textil (venta de ropa) y las altas se concentran en Gastronomía y Cafetería. También, en los comercios de cercanía y, en este sentido, mencionó que han abierto muchos negocios de venta de alimentos minoristas, como las cadenas de almacenes o pequeños supermercados. Meljim señaló que hay rotación de comercios y que, si bien cierran, no demoran mucho en abrir nuevamente las persianas, con otra propuesta.
Poca oferta de locales
Estanislao Puelles, vicepresidente del Consejo Federal de Colegios Inmobiliarios de Argentina, sostuvo que no sólo hay poca oferta de locales comerciales en alquiler, sino que la demanda es alta; al punto que, para ciertas propiedades, llegan a tener más de un interesado. Pero también indicó que es cierto que muchos inquilinos alquilan, pero 8 o 10 meses después, cierran. Y si bien eso se considera, desde el punto de vista de los comercios, como una baja, el espacio se vuelve a alquilar de inmediato.
Precisó que, en las arterias más importantes, tanto de la Ciudad como de los departamentos, no hay casi disponibilidad y si un local se desocupa, apenas termina de irse el locatario, llega uno nuevo. Incluso, en las inmobiliarias reciben llamados de personas que preguntan si tienen algún lugar y piden que les avisen en cuanto haya una vacancia. En cambio, en los lugares más perimetrales, cuesta un poco más, aunque también se alquilan.
Explicó que lo que observa es que los comerciantes, cuando tienen una buena ubicación, tratan de “defender” el lugar, porque saben que después es muy difícil volver a alquilar en un punto similar. De hecho, las grandes marcas salen a buscar locaciones en las crisis y detalló que esto ha sucedido en el pasado con las casas de electrodomésticos, bancos y franquicias de comidas y cafeterías. Esto, porque saben que en las buenas épocas no se consigue lugar en ciertas calles.
Preocupación
Adrián Alín, presidente de la Cecitys (Cámara Empresaria de Comercio, Industria, Turismo y Servicios de la Ciudad de Mendoza), comentó que realizaron un relevamiento de los negocios que cierran, pero reconoció que es cierto que vuelven a abrir, sobre todo en el sector del microcentro.
Mencionó que, a diferencia de lo que ha sucedido con otras crisis, desde los ‘90, ahora el sector comercial no está endeudado, porque no había oferta de créditos y se viene auto sustentando desde hace un tiempo, lo que le ha permitido enfrentar de otra manera la baja en las ventas y la rentabilidad. Aunque también señaló que, como alternativa para sostenerse, algunas cierran, cambian de razón social y vuelven a abrir, y que poco se habla del impacto en el empleo y la informalidad.
El también vicepresidente de Comercio de la FEM (Federación Económica de Mendoza) manifestó que la situación está complicada, porque las tarifas de servicios se han dolarizado pero los precios de venta y los sueldos, no. Además, la incertidumbre por parte de quienes tienen un empleo, sobre si lo seguirán teniendo, hace que prime la prudencia en el consumo.
Alín añadió que, hace un par de semanas, los jugueteros ya planteaban, con preocupación, que avizoraban una caída en las ventas para este Día del Niño, de alrededor del 40%. Y que, si bien hay comerciantes que están notando un leve repunte en la actividad, se trata de una recuperación después de una profunda caída y se está lejos de los números de 2023.
Otros departamentos
En Guaymallén el saldo de aperturas y cierres también es positivo, ya que, en los primeros siete meses del año, se solicitaron 268 altas y se produjeron 99 bajas. Los cierres se concentraron en abril y mayo, mientras que hubo un pico de altas en junio (68). Sin embargo, se debe tener en cuenta que la habilitación definitiva suele no coincidir con el momento en que el comerciante presenta el pedido y lo mismo puede suceder con los cierres, que la baja se concreta más tarde, porque depende de actos administrativos (o, incluso, porque el negocio tiene deudas que deben saldarse antes de realizar el trámite).
En Luján, en cambio, ha habido más trámites de cese de actividad que de habilitación en lo que va de 2024: han sido 120 de cierre y 101 de apertura. Los rubros que más se abren, explicaron desde el municipio, son los comercios minoristas de proximidad, como despensas, kioscos, verdulerías y carnicerías.
Y desde Maipú comentaron que los cierres de locales no alcanzan un número significativo y que pueden depender de cuestiones estacionales, como la época de cosecha en la zona este del departamento. Sumaron que el municipio está incentivando las ventas con la cámara de comercio local, como promociones como un sorteo para el Día del Niño (y otras para fechas especiales, como Día del Padre, Día de la Madre, Navidad).
Indicaron que hay una gran heterogeneidad entre la zona urbana y la rural, y que también hay localidades, como Chachingo, que reciben muchos turistas y tienen otra realidad. A esto se suman los loteos en la zona Sur, con un público ABC1.