La escasez de dólares en Argentina, en un año de elecciones presidenciales, orilla a la industria a enfrentar desafíos que no estaban programados, amenazando su estabilidad económica y también el empleo. La falta de divisas y las trabas impuestas pro el Gobierno para el pago a los proveedores en el exterior han diluido la fluidez en la importación de insumos lo que ha generado un impacto negativo en la producción, obligando a algunas empresas a detener sus líneas de trabajo por faltas de precios y tomar medidas drásticas como la renuncia de contratos, el adelantar vacaciones o también restringir las horas extras.
La imposibilidad de realizar pagos al exterior, que se fue endureciendo el último año, ha llevado a la falta de insumos, generando una cadena de eventos que afecta la producción de las empresas de diversos sectores, quienes se han visto impactadas por la falta de materias primas. Matías Díaz Telli, presidente de la Unión Industrial de Mendoza (UIM), señaló que la situación es crítica porque “Las cadenas productivas están cortadas. El faltante de insumos afecta porque hay menos productividad y como consecuencia, precios más altos y peor calidad en la góndola”.
Ante la consulta, de cómo influye el abastecimiento de insumos y su precio en dólares a la producción, Mariano Guizzo, titular de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de Mendoza (Asinmet), explicó que el impacto fue muy negativo, “primero con la eliminación de ciclos de pago (prácticamente hoy las compras se pagan de contado), luego empezó el faltante tanto de productos importados como de entrega ya que los proveedores no quieren vender por que no saben a que precio reponer”.
Renunciar contratos
Mariano Guizzo agregó que los proveedores buscan “mantener una posición de seguridad ante un proceso inflacionario constante”. En Mendoza, esta situación de faltante de insumos se agrava debido a la distancia que existe con los centros de reposición. A modo de ejemplo, actualmente la industria vitivinícola, ve con gran preocupación la próxima cosecha por la falta de levadura, elemento clave para fermentar el vino. No obstante arrastran déficit en insumos como papel, corchos, etc.
El Banco Central de Argentina (BCRA) se ha quedado sin reservas, lo que ha llevado al sector privado a enfrentar dificultades financieras. Empresas reportan que, desde hace un mes, no se han autorizado cancelaciones de deudas en moneda extranjera. La falta de claridad en el sistema de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) ha generado confusión y se percibe como una posible estrategia para retrasar operaciones comerciales y financieras.
Julio Totero, industrial metalmecánico, marcó las dificultades que enfrenta el sector al tratar de cumplir con los contratos firmados por la restricción de importaciones de insumos. “El sector esta mal, no solo por la restricción de los insumos, sino por los precios de lo que hoy se puede conseguir en el mercado. Es un disparate absoluto”. El integrante de Asinmet, contó que “aquellos que teníamos un contrato firmado, hoy tenés que cumplir con tus clientes y tenés que salir a comprar cosas a precios que no son los que cotizaste”.
El empresario detalló que hay un estado de desesperación importante. Porque al hablar del precio de los insumos en el marcado remarcó que “No hay un parámetro. Porque la gran mayoría no importa y consume productos nacionalizados. Ahí la mayoría de los proveedores te sigue cobrando al dólar oficial, pero lo que antes valía dos dólares ahora vale siete”. Agregando que en algunos casos ya ni el margen de ganancia pueden “servir de resguardo, porque estás perdiendo dinero”.
Suspensión de extras
Guizzo, al hablar sobre la suspensión de las horas extras y el adelantamiento de las vacaciones, como un síntoma de la situación actual que vive el sector, destacó que en Mendoza existe esta realidad, “sobre todo la eliminación de las horas extras. Es lo que más se notó e impactó en nuestras empresas”.
Leandro Ugo, empresario meltalmecánico, contó que la situación de abastecimiento es muy mala, “pero estamos fabricando. Estamos tratando de comprar a proveedores locales, pero nos cobran al valor del dólar Met. Está muy complicado”. Agregando sobre los turnos de trabajo que “Nosotros cortamos las horas extras por ahora, pero más que nada porque no tenemos ahora problemas con el plazo de entrega”.
Ugo, destacó que el adelantamiento de vacaciones y la reducción de horas extras son estrategias adoptadas por algunas empresas para adaptarse a la situación. Porque “es complicada la situación para importar insumos, y te ves obligando a buscar proveedores locales que cobran al dólar Met. Estamos trabajando bien, pero la importación se ha reducido un montón para nosotros”.
“Hay algunas empresas que están adelantando o anticipando vacaciones porque no están produciendo atento a esta situación”, señaló Totero. Aclarando que hay algunos casos que pueden, no tienen contratos a cumplir, y “solamente fabrican productos para su stock y pueden frenar hasta tanto aclare. Pero el que tiene contratos específicos de fabricación de un bien de capital, de una instalación o de un servicio, tiene que seguir y cumplir”, puntualizó.
A corto plazo
Las perspectivas a corto plazo son sombrías. Porque la falta de regulación e incertidumbre política generan un clima de inestabilidad que afecta a la industria. Los empresarios esperan una inflación alta, con tasas de financiamiento elevadas y una persistente falta de divisas, lo que dificultará el acceso a bienes e insumos. Se espera que la situación mejore... apalancada en el aumento de la producción de oil & gas, una gran cosecha y el incremento de la actividad minera.
Para Leandro Ugo las perspectivas dependerán Gobierno que sea elegido, “Porque si sigue Massa, va a seguir lo mismo. Y si no, calculo que algo va a cambiar en algún momento”. Por su parte, para Matías Díaz Telli comentó “Algunos están aguantando como pueden, a ver cómo pasan el verano”. Remarcando que “Si tenes una línea de producción o un máquina parada por falta de un repuesto, dejas sin tareas a un montón de gente (sumado al impacto de falta de insumos)”.
Por último Mariano Guizzo, agregó que “en el corto plazo esperamos que empeore el sector, va a continuar una alta inflación, altas tasas de financiamiento y falta de divisas, lo que impide acceder a bienes e insumos intermedios para producción y agregar valor”.
Mientras que en una visión más extendida, marcó que “a mayo o junio la situación debería mejorar considerablemente apalancada en tres pilares”, destacando una balanza positiva en Oil&Gas principalmente por Vaca Muerta, porque se espera de una gran cosecha que generará mayor cantidad de divisas y por un incremento en la actividad minera que va a aumentar las exportaciones.
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