Entre 2011 y 2022, la economía creció 1,8%, pero la población se incrementó un 14%, equivalente a 6 millones de habitantes, lo que explica la caída del PBI per cápita. Un informe económico elaborado por la Bolsa de Comercio de Rosario muestra el crecimiento de la actividad, provincia por provincia, a lo largo de la última década, en la Argentina.
El ranking de mejor desarrollo lo encabeza Neuquén, con 57%, como consecuencia del desarrollo de Vaca Muerta, y los peores desempeños los muestran Catamarca, Mendoza y la Ciudad de Buenos Aires, con caídas de 10,5%; 7,6% y 6,1% respectivamente.
Las cinco que más crecieron fueron Neuquén, Santiago del Estero, Jujuy, Misiones y La Pampa, según informó la agencia Noticias Argentinas.
Si el crecimiento de Neuquén está dado por la actividad hidrocarburífera, el de Santiago se explica por el corrimiento de la frontera agrícola y el aumento de la superficie de tierra cultivada, especialmente de soja, en todo el período. En el caso jujeño, la variable central es la explotación de litio.
¿Mejoran las condiciones de vida?
Si bien Neuquén es la provincia que más creció, a partir del acelerado desarrollo de la localidad de Añelo, esto no se traduce necesariamente en mejores condiciones de vida.
Los principales precios de la economía -en especial, alquileres y alimentos-, siguen los valores de la actividad hidrocarburífera, que paga los mejores sueldos de la provincia, generando enormes dificultades al resto de los trabajadores, especialmente los del sector público. Curiosamente, Neuquén encabeza el ranking de deuda per cápita por provincia.
El caso pampeano también es particular, ya que cuenta con tierras muy fértiles en el norte de la provincia, pero el resto sufre un proceso de desertificación que golpea al sector productivo, como consecuencia del desvío del río Atuel de su cauce natural, aguas arriba, por parte de Mendoza.
El conflicto se encuentra desde hace años en manos de la Corte Suprema de la Nación. El modelo pampeano combina fuerte actividad agrícola ganadera, con intervención del estado en sectores clave como crédito y vivienda, a través del banco provincial y el instituto de la vivienda.
La provincia tiene también una empresa petrolera. Todos estos recursos le permiten fijar precios testigo que garantizan cierta estabilidad.
El gobernador de La Pampa, Sergio Ziliotto, respecto del posible “Pacto de mayo” lanzado por el presidente Javier Milei, respondió que está “dispuesto a dialogar, pero no para el ajuste”. En ambos casos, otro dato saliente es la estabilidad política.
Desde el regreso de la democracia en 1983, Neuquén fue gobernada por distintas líneas del Movimiento Popular Neuquino, del que el actual gobernador Rolando Figueroa es un desprendimiento. En el caso de La Pampa, la provincia ha sido gobernada por el peronismo.
