El mercado ejerció una alta demanda de dólares este viernes y el Banco Central terminó la jornada con ventas netas por unos 290 millones de dólares, el monto más alto para una jornada en al menos un año.
Así, la autoridad monetaria acumuló ventas netas por unos 634 millones de dólares en lo que va de noviembre. La demanda se fue incrementando a medida que se fue acortando el tiempo para las elecciones que se celebrarán el domingo próximo.
El volumen negociado hoy en el segmento de contado es el más alto desde el 25 de octubre de 2019, señaló Gustavo Quintana, analista y operador de PR Operaciones de Cambio en el centro porteño.
También explicó que la mayor demanda en el segmento mayorista y simultánea escasez de oferta genuina activaron fuertes ventas del Banco Central para atender el faltante de dólares en la rueda previa a las elecciones del domingo.
Las ventas del Central se dieron para no convalidar una devaluación más pronunciada que la “por goteo” que se viene convalidando desde hace 21 meses. Así, el tipo de cambio mayorista cerró a 100,22 pesos para la venta, cinco centavos arriba del cierre del jueves.
Las cotizaciones bursátiles MEP y de contado con liquidación operaron con alzas del 0,6%, alcanzando los 184,50 pesos.
El dólar blue
El precio del dólar en el circuito informal de divisas porteño descendía 6,50 pesos (3,15%) hasta los 197 pesos para la compra y 201 pesos para la venta, en lo que era la última rueda cambiaria antes de las elecciones legislativas del domingo.
En los últimos treinta días, el precio del billete ha escalado un 8% en las agencias informales de cambio del microcentro porteño. Y desde que se inició el año, el incremento en la cotización es del 20,5%.
En los bancos, el tipo de cambio minorista cerró en los 105,82 pesos, lo que posicionó la cotización “solidaria” -que contempla una presión impositiva del 65%- en los 174,60 pesos.
En medio de una elevada incertidumbre, típica antes de un proceso electoral, algunas agencias informales del centro porteño estaban vendiendo divisas pero mantenían cerrada la compra por la posibilidad de que el precio se desinfle, lo que finalmente ocurrió este viernes.
El precio del billete subió en las últimas jornadas por varios motivos: este año corre desde atrás a una inflación que alcanzó el 41,8% en el acumulado de los primeros diez meses del año; y hay expectativas de devaluación para después de las elecciones.
Esas expectativas están motorizadas por la elevada emisión monetaria, por la brecha entre el “blue” y el mayorista que supera el 100%, y por la inflación “reprimida” por el congelamiento de precios y de tarifas de servicios públicos.
