“Una misión de funcionarios mendocinos estuvo en Canadá, nos invitaron a venir hace dos años. Trajimos a 35 de nuestros inversores de Nueva York, Londres, Estocolmo y Canadá y el gobernador nos dijo vengan a hacer negocios”, decía en 2006 el presidente de la minera Tenke, Paul Conibear, después de que la justicia frenara las exploraciones en Villavicencio.
Esta semana San Juan estuvo en los ojos del país debido a la Expo Minera, allá fueron los funcionarios mendocinos a formalizar el ingreso de Mendoza en la Mesa del Cobre. La administración Cornejo trata de no dejar feria minera por visitar donde sea y aprovechar para explicar la situación de la Provincia, hacen bien porque la Mendoza de la institucionalidad, como les gusta llamarla, huele mal en el sector mundial minero por “falta de seguridad jurídica” y lo peor es que antecedentes sobran para cargar con el mote. El proyecto más avanzado por el cual Mendoza llegó a esa Mesa del Cobre es San Jorge. San Juan tiene tres (Josemaría, Los Azules y el Pachón), Salta con Taca Taca y Catamarca con el proyecto MARA.
¿Qué pasa con San Jorge?
Desde el Gobierno, a pesar de haber ido a San Juan, afirman que San Jorge no tiene movimiento ni hay novedades. Desde las empresas propietarias del mismo hay silencio de radio. Lo último que se supo sucedió en marzo del 2019 cuando el entonces presidente del proyecto, Taras Nechiporenko, anunció que la firma suspendía el funcionamiento de sus oficinas en Mendoza por tiempo indeterminado alegando “un “clima desfavorable para la industria minera, especialmente debido al funcionamiento de una ley antiminera en la provincia y a la politización del tema minero en general, y del proyecto San Jorge en particular”.
También dijo que “lejos de modificar dicha legislación, las autoridades del gobierno actual (administración Cornejo) han perjudicado el proyecto”.
Explicó además que la implementación de dicho proyecto hubiera permitido invertir al menos U$S 500 millones de dólares, creando no menos de 4.000 puestos de trabajo en la etapa de construcción y 1.000 en la etapa de operación y que se reservaban el derecho de retornar el proyecto San Jorge, si las condiciones cambiaran.
Manuel Sánchez Bandini, subsecretario de Energía y Minería de Mendoza, figura en una nota del sitio La Política Minera y citada por El Cronista en el que se indica lo siguiente: ¿Por qué invitaron a Mendoza a la Mesa del Cobre? Fundamentalmente por dos proyectos en carpeta. El que más rápido puede iniciar la producción es San Jorge, en la localidad de Uspallata, al norte de Mendoza. Ese proyecto ya tiene finalizada su etapa de exploración y solo aguarda por la aprobación de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA). Pero también facilita la operación su tamaño (105 km2), accesibilidad y las obras de infraestructura necesarias para el tratamiento de la roca. Una posibilidad es llevarla en tren a San Juan. Las reservas de cobre superarían las 300.000 toneladas. La otra iniciativa se da en Malargüe, donde se comenzó a perforar en el proyecto de cobre Cerro Amarillo, luego de más de diez años sin actividad minera metalífera en la provincia a raíz de las restricciones de la 7.722.”Se controla que todo el plan de inversiones se realice sobre las normativas vigentes. El plan es llegar a alrededor de 10 pozos en 2024, dependiendo de las condiciones del tiempo”, enfatizó el subsecretario de Energía mendocino.
Licencia social y complicaciones
Otro punto importante es la famosa licencia social San Jorge, recordemos que la comunidad de Uspallata se ha resistido al avance de la explotación de ese proyecto. La exploración ya la tienen realizada y varios trámites más.
Desde la Asamblea de Vecinos Autoconvocados de Uspallata entienden que San Jorge no tiene el permiso de explotación y que el estudio de prefactibilidad deberían haberlo actualizarlo. Entienden además que falta la audiencia pública que no pasó por la resistencia de la gente y la Legislatura cuando el entonces candidato a gobernador Francisco Pérez le pidió a los legisladores Justicialistas que no la aprobaran. Explican también que el Poder Ejecutivo no mandó a archivo el proyecto y lo sostuvieron, entonces la empresa presentó el proyecto biprovincial para hacer el proceso de lixiviación en San Juan en el 2014, aunque deberían haberlo hecho de nuevo. En el 2017 se archivó en la Legislatura, en el 2019 la empresa presentó otro proyecto de impacto ambiental en Legislatura, llegó también la modificación de la 7722 y se lo envió a guarda temporal, indicó Federico Soria, licenciado en Turismo especializado en administración de áreas protegidas y miembro de la Asamblea. Afirmó además que en marzo de este año, han vuelto a mover el expediente según el sistema electrónico del Gobierno y que hay una nota de Protección Ambiental.
Desde el Ministerio de Energía y Ambiente explican que el movimiento administrativo se debió a que cuando la ex titular de la Dirección de Patrimonio Ambiental, Miriam Salany, dejó esa repartición, se lo pasó al director de Minería Jerónimo Shantal porque “en conjunto ahora conforma la autoridad ambiental minera”.
Sorpresas para Cornejo
La vida y sus vueltas impactan hasta en la minería. Entre 2007 y 2008 la Asamblea de Vecinos Autoconvocados de Uspallata estudiaron, consiguieron el asesoramiento de profesionales y elaboraron el Proyecto Área Natural Protegia Uspallata-Polvaredas para llevarlo a la Legislatura así se declaraba el lugar como zona ambiental protegida y frenar definitivamente San Jorge. Al no tener Mendoza la iniciativa popular para presentar proyectos en la Casa de las Leyes, los vecinos fueron a buscar a un legislador que presentara el proyecto y lo encontraron. ¿Adivinen quiénes se prendieron?
Los radicales Héctor Quevedo y Tadeo García Zalazar, ellos lo presentaron en 2014, eran tiempos en que ambos eran opositores. Pero tenían un antecedente, en 2004, el entonces senador, ex ministro de Economía y actual asesor de la senadora nacional Mariana Juri, Enrique Vaquié, también presentó un proyecto parecido.
Ese proyecto de Quevedo y Zalazar está archivado en la Comisión de Ambiente de la Cámara de Diputados. Su presidente, Gabriel Vilche del PRO, dijo que está viendo con el subsecretario de Ambiente, Sebastián Melchor, “qué vamos a hacer”. Si algún legislador pide su desarchivo, deberá ser tratado y si se transforma en ley, el proyecto minero San Jorge queda enterrado de por vida, como ya pasó con el emprendimiento minero en San Carlos que se abortó cuando se amplió la Reserva Natural Laguna del Diamante.
Esto no es todo
Pero hay más, también se está tramitando la creación del Primer Parque Nacional en Mendoza que estaría en Uspallata. Si bien no alcanzaría a San Jorge, quedaría rodeado por el Parque El Leoncito al norte en San Juan, el Uspallata al sur y al oeste el Manantiales. “Los inversores al ver eso se van”, afirma Federico Soria.
Segunda adivinanza, ¿quién está involucrado en la decisión? El ministro de Defensa Luis Petri. Es que el acuerdo se tiene que hacer entre su ministerio y Ambiente que ahora depende del ministerio del Interior que lidera Guillermo Francos.
“Los mendocinos parecen conformarse con la agricultura y la ganadería, pues el miedo a lo que no conocen parece ser más fuerte”, indicó Waldo Pérez, vicepresidente de exploraciones de Latin American Minerals luego de la sanción de la ley 7722 en 2007.