Este martes, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) informó que publicaron un informe llamado “Distribución del Ingreso”, en el que analizaron que, al cierre del tercer trimestre, en Argentina el 60% de la población ocupada gana hasta $ 30.000.
Además, en base a los resultados del informe precisaron que el 10% más pobre de la población explicaba el 1,5% del total de ingresos, mientras que el 10% más rico concentraba el 32,1% al cierre del tercer trimestre del año.
Para analizar el nivel de equidad de los ingresos medidos se utilizó el Coeficiente de Gini, una relación matemática que tiene al “0” como el nivel de mayor igualdad y al “1” con el mayor desequilibrio, al cierre del tercer trimestre fue de 0,443 puntos, levemente por debajo del 0,449 de igual período de 2019.
En tanto, respecto al ingreso familiar por hogares, el informe del Indec reseño que el 60% de estas unidades percibieron salarios de hasta $ 60.000 al cierre de tercer trimestre del año.
Esta variación en la distribución del ingreso se produjo en un período de 12 meses en el que la actividad económica retrocedió 10,2%, el índice de desocupación subió al 11,7%, frente al 9,7% del tercer trimestre del año pasado, y los precios minoristas acumularon un avance de 37,7%.
El índice de salarios registró en el mismo período un aumentó 31,8 % hasta septiembre pasado, en la medición de los doce últimos meses-, casi seis puntos porcentuales menos entre uno y otro, como señal de la pérdida de poder de compra de los sueldos.
El Observatorio de la Deuda Social de la UCA -al dar cuenta los resultados del tercer trimestre del año, advirtió que alrededor del 44,2% de los argentinos se encontraban bajo la línea de la pobreza, es decir, sus ingresos no alcanzan para comprar el mínimo de alimentos, transporte, indumentaria y algunos servicios que conforman la Canasta Básica Total.
También advirtieron desde la Universidad que de no mediar la ayuda del Gobierno en medio de la pandemia de coronavirus, a través del programa de Ingreso Familiar de Emergencia y otros planes, ese guarismo podía haber trepado por encima del 55%.
Según el informe, uno de cada cuatro de las personas que están en la pobreza son indigentes, es decir, no perciben la cantidad de ingresos necesaria para comprar el mínimo de comida para la subsistencia.
Al respecto, el ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, manifestó su optimismo en que “en 2021 se van a recuperar los que cayeron en la pobreza por la pandemia”.
El ministro, en diálogo con Radio Rivadavia, planteó que uno de los objetivos del Gobierno es la creación de 300 mil empleos, sobre en el sector que “fue perjudicado por la pandemia”.
En ese sentido, se sumó a las últimas declaraciones del presidente Alberto Fernández y consideró que de la crisis “se sale con empleo privado”.
“Se van a recuperar el año que viene los llamados nuevos pobres, que no tienen problemas de vivienda, sino que el problema fue la falta de ingresos por la pérdida del trabajo”, dijo Arroyo.
El informe del Indec dado a conocer hoy detalló que la suma total de ingresos de la población creció 21,2% en relación con igual trimestre de 2019.
De ese total, los ingresos laborales registrados crecieron 14,6% y los no laborales, 38,7%. En la dinámica de estos últimos se destacaron los subsidios o las ayudas sociales del gobierno (incluye AUH, IFE, Tarjeta alimentaria, etcétera).
De esta forma, el ingreso promedio per cápita del total de la población, que corresponde a 28.506.758 personas, alcanzó los $19.713.
Por último, respecto a la población ocupada, el Indec precisó que se registró un ingreso promedio de $31.041 y un ingreso mediano de $25.000, equivalente al límite superior de ingresos del decil 5, bajo el cual se situó el 50% de las personas ocupadas.
El ingreso promedio de los primeros cuatro deciles de la población, ordenada según ingreso de la ocupación principal, fue de $11.387. El ingreso promedio del estrato medio (deciles del 5 al 8) fue de $31.748, mientras que el ingreso de los deciles 9 y 10 resultó equivalente a $69.004.
