Unos 1,4 millones de hogares en Argentina corren el riesgo de perder los subsidios a las tarifas de luz y gas debido a la falta de inscripción en el Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE). Aunque el plazo oficial para inscribirse venció el 4 de septiembre, el Gobierno aún permite el registro, ya que solo 300.000 de los 1,7 millones de hogares posibles han completado el trámite.
Según datos de la Secretaría de Energía de la Nación, el programa busca que los usuarios de tarifa social, pertenecientes al Nivel 2 (N2) de ingresos bajos, mantengan los subsidios a través de la inscripción en el RASE. A principios de julio, el Gobierno comenzó a impulsar esta medida con la publicación de la Resolución 90/2024, que exige el registro individual para continuar con el beneficio.
Este grupo de usuarios fue incorporado automáticamente al programa de Tarifa Social Federal bajo el gobierno anterior, pero sin verificación de si sus ingresos seguían siendo inferiores a la Canasta Básica Total (CBT). Ahora, la gestión actual busca reducir los subsidios energéticos y asegura que, si no se inscribe, el beneficio caducará y serán recategorizados como Nivel 1 (N1), el nivel más alto que no recibe subsidios.
Aunque el plazo inicial para inscribirse venció en septiembre, todavía existe la posibilidad de realizar el trámite y mantener el subsidio. El proceso es parte de una transición hacia subsidios energéticos focalizados, cuyo objetivo final es implementar una Canasta Básica Energética (CBE) que refleje mejor la situación económica de los hogares. El Período de Transición debería finalizar en noviembre, pero podría ser prorrogado.
Para inscribirse en el RASE, los usuarios deben completar el formulario disponible en la web oficial, una medida que les permitirá continuar recibiendo la Tarifa Social Federal y evitar el aumento en las facturas de energía.