La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) estimó un crecimiento para la economía argentina del 3,9% para 2022 y de 1 % para 2023, al tiempo que proyectó una expansión regional de 3,2% para este año y de 1,4% para el año próximo.
Las nuevas proyecciones son parte de un documento titulado Hacia la transformación del modelo de desarrollo en América Latina y el Caribe: producción, inclusión y sostenibilidad, que será presentado la semana próxima durante la Asamblea 39 bienal de la Cepal, que sesionará entre el 24 y 26 de octubre, en donde la Argentina pasará a tomar la presidencia protémpore.
La Argentina será nuevamente sede anfitriona de la reunión bienal más importante de esta comisión regional de las Naciones Unidas, luego de 59 años, cuando el economista argentino y padre de la teoría de desarrollo económico, Raúl Prebish, secretario de dicha Comisión, organizó la cumbre en Mar del Plata en 1963.
En tanto, las proyecciones fueron dadas a conocer hoy a la prensa por el secretario ejecutivo de la CEPAL, José Manuel Salazar-Xirinachs, quien fue recibido por el Canciller Santiago Cafiero, para suscribir formalmente acuerdo para que la Argentina sea sede de la Asamblea, que contará con la presencia del presidente Alberto Fernández.
Esas estimaciones de crecimiento de la región están atravesadas por la crisis económica que se generó por la pandemia, de la cual región no terminó de salir, y de las crisis originadas por la guerra en Ucrania (shock de oferta y la consecuente inflación).
Tanto la Cepal como el FMI y el Banco Mundial revisaron sus proyecciones a la baja y prevén una desaceleración global para el año próximo y en particular, para la Argentina, las proyecciones son levemente más pesimistas que las de los otros organismos y que las proyecciones estipuladas en el proyecto de Presupuesto 2023.