El Senado bonaerense le dio media sanción el miércoles a un proyecto de ley que busca impulsar la industria del vino de Buenos Aires, a partir de la creación de un régimen de promoción e incentivos. La iniciativa dispone, entre otros puntos, que los grandes supermercados en esa provincia otorguen el 2% de las góndolas a los vinos bonaerenses.
El proyecto, elaborado por el legislador del Frente de Todos Luis Vivona, establece un Régimen de Promoción e Incentivo para la Industria Vitivinícola, un Registro Provincial de Viñedos y Bodegas productoras de vino, el Centro Técnico Vitícola y la marca “Vino Buenos Aires”, para estampar en los productos elaborados.
También fija beneficios impositivos, como una alícuota de 1,5% del Impuesto sobre los Ingresos Brutos para las actividades de venta al por mayor de vino, y una exención del pago de impuesto inmobiliario rural por un plazo de 10 años y crédito fiscal aplicable al pago de Ingresos Brutos para aquellas bodegas bonaerenses que exporten vino a granel.
“Esta ley pone en valor no sólo la industria, sino también la posibilidad de generar trabajo y turismo en nuestra provincia”, afirmó Vivona. “Es el reconocimiento para aquellos trabajadores de la tierra y el comienzo de algo que va a seguir creciendo porque no me cabe dudas que la provincia de Buenos Aires se va a posicionar como exportadora de vinos”, añadió el senador.
Por su parte, el radical Ariel Martínez Bordaisco indicó que el proyecto es muy importante, porque “la industria vitivinícola es una de las industrias más relevantes de las provincias de Cuyo, pero hace mucho tiempo se viene desarrollando de forma sostenida en Buenos Aires, con muy buenas repercusiones. Tiene muchas potencialidades. Más allá de la exportación de la vid, es un medio más para fomentar el turismo”.
De acuerdo con cifras oficiales, la producción de vino en el territorio bonaerense creció un 250% en la última década y la provincia ya ocupa el décimo lugar en importancia de producción a nivel nacional.
La presidente de Bodegas de Argentina, Patricia Ortiz, resaltó que la cámara es federal y que los elaboradores de Buenos Aires ya están trabajando con la entidad en el tema de los caminos del vino. Sin embargo, indicó que, de momento, se trata de proyectos muy pequeños, que no alcanzan un volumen significativo.
Detalló que Bodega Gamboa tiene un restorán, un salón de eventos y recibe visitas, y que venden todo lo que producen de modo directo. Bodega Saldungaray también comercializa su producción en el establecimiento, a algunos restaurantes y vinotecas. Y la única que podría alcanzar un mayor volumen es Costa y Pampa, del Grupo Peñaflor.
De ahí que Ortiz no considere que puedan ocupar ese 2% de las góndolas de supermercados que establece el proyecto. Y sumó que duda que les interese, ya que los costos logísticos de llegar a las grandes cadenas son altos y ya han resuelto la comercialización. De todos modos, planteó que es positivo que la vitivinicultura en Buenos Aires siga creciendo y deslizó que sería bueno que Mendoza copiara el resto de los incentivos.
Mauro Sosa, gerente del Centro de Viñateros y Bodegueros del Este, reconoció que no alcanza a dimensionar el impacto que esta ley podría tener para la producción local, aunque consideró que el 2% de la superficie de las góndolas no sería relevante, ya que se trata sólo de los supermercados de Buenos Aires.
Sin embargo, mencionó algunos números de la producción bonaerense, que alcanzó los 3 mil quintales en 2021, con una superficie de 162 hectáreas que, si bien se ubica en el décimo lugar en el país, alcanza apenas el 0,08% del total nacional. En cuanto al mercado externo, Buenos Aires exportó 289 hectolitros en botella, lo que se tradujo en U$S 260 mil. Por otra, Sosa deslizó que la vitivinicultura no se puede impulsar sólo con incentivos y que el 250% de crecimiento en una década, que menciona el proyecto, se ha dado sobre una base muy pequeña.
En tanto, Sergio Villanueva, director ejecutivo de la Unión Vitivinícola Argentina, expresó que la vitivinicultura está avanzando en varias provincias porque, con pequeñas unidades económicas, se puede empezar a producir y generar un emprendimiento, que también genera turismo a partir de la combinación con la cocina y el hospedaje.
Villanueva consideró que, cuanto más se expanda la actividad, mejor, aunque indicó que las condiciones agroecológicas del oeste argentino lo tornan una zona muy competitiva. Pese a eso, señaló que se puede producir vinos, como está sucediendo, en Entre Ríos, Buenos Aires e, incluso, en áreas marítimas, como Uruguay.
El gerente de la UVA añadió que están en contacto con el senador Luis Vivona, por lo que podrán consultarle qué implicaría este 2% de las góndolas. Pero también expresó que en Buenos Aires se observa una cuestión contradictoria, como la media sanción de este proyecto, pero también el aval al de tolerancia cero de alcohol (en lugar del 0,5% actual) y la prohibición de publicidades de bebidas alcohólicas, que afectan a la industria del vino, bebida nacional.