Mientras el Departamento General de Irrigación tiene previsto cerrar el proceso participativo para que la comunidad en general proponga aportes al anteproyecto del Código de Aguas el próximo 15 de agosto y apuesta a que el gobernador Alfredo Cornejo pueda enviar la iniciativa a Legislatura en septiembre, el Centro de Viñateros y Bodegueros del Este solicitó una prórroga de al menos 180 días para poder alcanzar los consensos necesarios para la aplicación del mismo.
La solicitud fue enviada ayer al superintendente de Irrigación, Sergio Marinelli, y detalla que, “tras haber agotado las instancias de lectura, análisis y consideraciones del anteproyecto del Código de Aguas”, advierten que “surgen dudas y confusiones sobre las bondades y consecuencias de la aplicación del mismo, que más allá de su objetivo primario (unificar y armonizar legislaciones, etc.) avanza e introduce innovaciones que colisionan con los usos y costumbres”.
El texto resalta que, durante ese proceso de análisis, contaron con la presencia de Marinelli y de los redactores del texto, y que la propuesta fue debatida internamente y se consideraron las opiniones de expertos en la materia -quienes fueron convocados en la etapa preliminar de la iniciativa-, pero que saben de la existencia de informes técnicos que no han sido puestos a disposición.
Consideran que, sin un plan hídrico que permita conocer la probable oferta y demanda de agua, que además incluya un plan de obras y, sobre todo, “transparente la información sobre derechos eventuales, superficies irrigadas en la provincia y otros temas sensibles, como el criterio de distribución del agua cuando se trata de casos como el río Tunuyán en su cuenca superior e inferior o cómo se determinará técnicamente la entrega de volumen por cultivo que hoy se distribuye en litros por segundo por hectárea, estamos convencidos que no se debe avanzar con la presentación de este proyecto en la Legislatura provincial”.
En esta línea es que plantean la necesidad de una prórroga, no menor a 180 días, “con el ánimo de alcanzar los consensos suficientes que nos propone la propia idea del código”.