Con el anuncio de que San Jorge retomará las tareas de exploración y que dentro de uno o dos años podría comenzar con la construcción de la mina para extraer pórfidos de cobre, se lanzó la Cámara de Proveedores Mineros de Uspallata. El acto estaba previsto para las 18 con la presencia de empresarios del sector, legisladores provinciales y funcionarios del municipio de Las Heras.
Sin embargo, manifestantes en contra de la minería postergaron la apertura y el discurso de Edgardo Vera, el presidente de la Cámara. Vera es comerciante del pueblo cordillerano y se ha manifestado varias veces a favor de la minería. En este marco, ha creado la cámara con el fin de nuclear a posibles trabajadores y personas que allí viven ya que, expresó, será un crecimiento para Uspallata.
Edgardo Vera y su familia fueron amenazados de muerte por algunos manifestantes. Ya solicitó custodia de las autoridades. Además señaló que los manifestantes no lo dejan salir de la oficina de la Cámara. Dijo que son unas 40 personas, y solo hay dos policías para controlar la situación.
En medio del entusiasmo que muchos de los que apoyan la actividad poseen, el presidente de la flamante cámara logró convocar a interesados de la zona así como al resto de la provincia.
No obstante, cuando el acto estaba por comenzar, manifestantes antimineros se presentaron para impedir que Vera subiera al estrado para dar sus palabras de bienvenida. Presentes en el evento, dijeron que hubo amenazas para incendiar un local.
La inauguración de la cámara también fue apoyada por la Uocra, el sindicato de la construcción que desde siempre se ha expresado a favor de la minería. “Hemos logrado un apoyo importante y creemos que el 80% de los uspallatinos está a favor de la minería”, expresó Vera.
En este contexto, agregó que la cámara buscará afianzarse ya que esperan que Uspallata crezca en varios sentidos en los 20 años que estará San Jorge en la zona.
El presidente de la Cámara no solo criticó a los manifestantes que impidieron el acto y no lo dejaron salir de su oficina sino que además denunció que uno de sus nietos fue herido por los que protestaban.
“No puede ser que 50 personas hagan lo que quieran y se salgan con la suya. Voy a seguir peleando por la gente de Uspallata que quiere el desarrollo de la minería”, señaló Vera.