Un nuevo aniversario encuentra a Diario Los Andes con el orgullo de seguir sirviendo a los mendocinos, un precepto cumplido con creces durante su extensa trayectoria.
Ese derrotero permite mostrar hoy a nuestro medio posicionado claramente como referente en materia comunicacional en la provincia y la región.
Una permanencia basada en su independencia periodística y su calidad informativa.
Diario Los Andes creció y se consolidó en el tiempo con la premisa de rescatar y fortalecer la identidad mendocina.
Así apostó a la promoción de proyectos que aportaran al avance de los mendocinos, pero también predispuso su mirada crítica ante desviaciones ocasionales del poder en desmedro de los intereses locales.
La audacia y visión del fundador, el doctor Adolfo Calle, en línea con muchos exponentes de su generación, permitió que este medio se constituyese en un valorado aporte al crecimiento de la provincia, especialmente si se tiene en cuenta la desolación que dejó el terremoto de marzo de 1861 y de otros problemas que siguieron en el diario transitar.
Nunca está de más repetir algo palpable: los mendocinos emprendedores de aquellos tiempos comenzaron a construir la gran provincia que es hoy Mendoza, aun reconociendo carencias y desafíos para décadas próximas.
Diario Los Andes se encuentra en un consolidado periodo de transformación en lo que respecta a cambios de época impuestos en materia comunicacional, siempre con la premisa de entrar de lleno en el mundo digital para mantener y afianzar el vínculo con sus seguidores también en ese campo que se encuentra en permanente expansión.
El fuerte desafío que plantea la tecnología a los medios de comunicación exige tener que aferrarse a la calidad y a la búsqueda de la excelencia en materia informativa, de contenidos periodísticos.
En ese marco, la profesionalidad le permite hoy a este diario posicionarse como uno de los medios de referencia en cuanto a información actualizada, además de seguir siendo un ícono entre los periódicos impresos del país.
Pero lo que jamás se resignará es el apego a los principios fundacionales, expresados en la Argentina de hoy en el respeto a la institucionalidad, la vigencia de las libertades públicas, los valores republicanos sintetizados en la libertad de opinión y de prensa, la división de poderes, la periodicidad en el ejercicio de la función pública y el normal funcionamiento del Estado al servicio de las necesidades de la gente. En este aspecto hay que remarcar el fomento al accionar educativo, base de sustentación de toda sociedad que se considere digna.
Por respeto a dichos preceptos, este año un amplio grupo empresario mendocino se hizo cargo de Los Andes con el principal propósito de reforzar su liderazgo potenciando, a su vez, la consagrada marca periodística y apuntalando su bien ganado prestigio como protagonista de la agenda de Mendoza. El legado de 141 años de trayectoria es más que suficiente motivo para llevar a cabo con absoluta convicción la propuesta renovadora del producto informativo y del contacto con la comunidad.
Reiteramos finalmente una justísima definición de un ex director de este medio: Los Andes comparte el tesoro de sus recuerdos con sus lectores porque es, al fin y al cabo, la obra mancomunada de este pueblo y sus periodistas.