Hay acciones que deben ser mantenidas por las autoridades responsables de la administración de los espacios públicos y por los particulares que los usan.
Nos referimos a la limpieza de los lugares que combinan montaña, arroyos y otros sitios donde la naturaleza merece ser privilegiada y cuidada para preservar la biodiversidad que encierran esos ambientes.
En este sentido deben ser reivindicados como valiosos los operativos que se realizan en el Parque Deportivo de Montaña, un sector natural de la ciudad de Mendoza donde se pueden realizar diversas actividades deportivas, como ciclismo, senderismo, mountain bike, running y trail running, en distintos circuitos adaptados para estas prácticas.
Se encuentra en los alrededores del teatro griego Frank Romero Day y el Cerro de la Gloria, al Oeste del Parque General San Martín.
El cerro El Llorón es uno de los lugares emblemáticos de esta atractiva zona.
En ese sector se realizan periódicamente eventos de limpieza y cuidado del ambiente, como el efectuado hace algunos días bajo el lema, “Sin bolsas plásticas, montañas sostenibles”.
Además, incluyó actividades lúdicas y deportivas junto a talleres de concientización sobre cómo cuidar nuestras bellezas naturales, además de divulgar temáticas como compostaje, energía, y hasta la reparación rápida de bicicletas.
Vecinos y vecinas se acercaron a disfrutar del evento que se organizó en pos del cuidado de sitios que sin protección adecuada, estarían condenados a la acumulación de desperdicios y a una progresiva degradación.
“Sin bolsas plásticas, montañas sostenibles” fue la propuesta en esta ocasión, iniciativa que debe mantenerse en ese espacio y en otros que tiene la provincia, y nos referimos a los diques y sus adyacencias, o zonas de Potrerillos, como por ejemplo parajes del Cordón del Plata, en las cercanías de Vallecitos.
En todos esos sitios, a los que agregamos sectores de El Challao y Villavicencio, la meta debe ser recorrerlos asumiendo hábitos que tiendan al disfrute de la naturaleza, con el añadido de cuidarlos ambientalmente para que sigan prestando sus servicios de recreación, deporte y apoyo a la salud.
Conviene recordar en este comentario editorial algunos operativos de higiene ambiental que se realizaron en el pasado, y que ahora resultan pioneros.
Citamos, por ejemplo, la labor de vecinos del valle de Las Vegas (Potrerillos), quienes en diciembre de 2004 y sobre un espacio de seis hectáreas realizaron un circuito peatonal, sin el ingreso de motos y cuatriciclos. El proyecto pretendía la protección de la flora y la fauna del lugar.
Otro antecedente para destacar fue la limpieza que jóvenes de Luján de Cuyo, empleados municipales y científicos del exCricyt (hoy CCT-Conicet Mendoza) efectuaron en marzo de 2004, en vertientes y quebradas del Cordón del Plata.
Los mentores de esta iniciativa fueron el investigador José “Pepe” Rodríguez, y los entonces concejales Paola Rodríguez y el escalador y ambientalista Ulises Sila Vitale, quien subió montañas en casi todos los continentes.
Hay que militar e insistir sobre la importancia de reducir la cantidad de bolsas y residuos plásticos generados cuando salimos al campo, para decirlo de una manera general, protegiendo la biodiversidad y los recursos naturales y promoviendo una cultura ambiental más consciente y participativa.