Otro gran logro se materializó en estos días en el Hospital Central de la provincia, al realizarse allí el segundo trasplante cardíaco en poco tiempo, una forma directa de mostrar el compromiso con la salud, de ese establecimiento, orgullo de la región oeste de la Argentina.
En abril se puso en marcha el Programa de Trasplante Cardíaco, a cargo del equipo de Cirugía Cardiovascular, encabezado por los doctores Sergio E. Felici y Walter Ferrara, junto con otros destacados profesionales del medio. En ese momento se materializó el primer trasplante y ahora, hace dos semanas, se llevó a cabo la segunda intervención de este tipo.
El beneficiado fue un paciente de 38 años, con antecedente de un infarto masivo sufrido hace unos meses, sin posibilidad de enfrentar una cirugía cardíaca convencional.
La secuencia podría completarse, si las condiciones lo permiten, con una intervención más antes de fin de año. Como antecedente podemos recordar que, hace un poco más de treinta años, Mendoza marcaba un hito para la salud en la Argentina, cuando un 6 de junio se concretaba, en el Hospital Italiano, el primer trasplante de corazón en la provincia. Un equipo dirigido por el cardiocirujano Claudio Burgos remplazaba el órgano a un hombre de 45 años.
Estos, los del corazón, son los remplazos más importantes y delicados por la trascendencia, en el cuerpo humano, de ese vital órgano.
A pesar de las limitaciones que impuso la pandemia del coronavirus, hubo mucha actividad en el Centro de Trasplante Público del nosocomio de calle Alem y fueron trasplantados 61 mendocinos, de los cuales el Central efectuó siete renales, cuatro hepáticos y treinta y nueve de córneas.
Por toda esta actividad, el principal nosocomio mendocino es el sexto hospital público que tiene trasplante cardíaco en el país, atendiendo la demanda de la región cuyana.
No hay que obviar que estas posibilidades van de la mano con el operativo de procuración de órganos en la provincia, que es muy destacada por cuanto implica 12,7 donantes por millón de habitantes, con una media a nivel nacional de 7,76 por millón de individuos.
Desde que empezó este particular y atípico año, la provincia ejecutó 30 acciones de procuración de órganos, 20 de los cuales se produjeron fundamentalmente durante el período de crisis sanitaria. Esto significa que, a pesar de la delicada situación de salud general por el virus, hubo familias que con sentido altruista siguieron donando órganos. Por otra parte, hubo equipos profesionales alistados para efectuar esas intervenciones.
Es una opción terapéutica más del amplio abanico de la cirugía cardíaca que se puede ofrecer a los pacientes con patologías cardiovasculares, sobre todo estructurales y no estructurales, como la miocardiopatía dilatada y otros males del corazón.
Empero, no está ganada la batalla en este campo asistencial porque en nuestro territorio hay aproximadamente 450 personas que están esperando un trasplante que les pueda salvar la vida, y asegurado el continuar viviendo, mejorar la calidad de existencia.
Se busca entonces generar más conciencia a todas las personas que quieran ser voluntarios de manera desinteresada, con el simple fin de ayudar a aquellos que lo pueden necesitar en una situación crítica.
