La Legislatura de la provincia de Santa Cruz derogó recientemente la ley electoral, que incluía el controvertido sistema de lemas, oficialmente denominado de doble voto simultáneo y acumulativo, que rigió en aquel territorio durante 35 años y que por el momento mantiene vigencia en otros distritos del país.
La derogación de un sistema que fue con razón muy criticado mientras estuvo en uso fue impulsada por el gobernador de Santa Cruz, Claudio Vidal, que ya en la campaña electoral de 2023 había prometido impulsar la erradicación de dicho mecanismo en caso de acceder a la conducción de la provincia. Por lo tanto, cumplió con su promesa.
Vale recordar que con la ley de lemas cada sector político o coalición que se presenta a elecciones constituye un lema, dentro del cual se pueden presentar sublemas, que no son otra cosa que listas dentro de la misma coalición o partido. El candidato que termina primero en esa especie de interna abierta suma los votos de sus competidores en el mismo lema. Es por ello que en distintas oportunidades ganó una elección quien se benefició con dicho sistema aun cuando un competidor de otro lema, sin competencia interna, fuese el que realmente obtenía el mayor respaldo de los votantes. Resultados injustos desde todo punto de vista.
Debe considerarse que en el caso que nos ocupa la modificación del sistema electoral santacruceño fue votada por unanimidad de la Legislatura de esa provincia. Se expidieron a favor los 23 diputados presentes, incluyendo a los del kirchnerismo, que fue el sector partidario que se benefició con el perverso sistema ahora erradicado para permanecer en el poder santacruceño durante más de tres décadas. Base de sustentación para el proyecto nacional que Néstor y Cristina Kirchner mantuvieron por largo tiempo en el país.
No pocos analistas políticos y constitucionalistas objetaron desde siempre el retorcido sistema de los lemas, ya que permite, como quedó demostrado en múltiples oportunidades, que puede obtener el triunfo electoral alguien que no haya conseguido la mayoría de los votos de la ciudadanía.
Ante planteos que se efectuaron desde la política contra el polémico mecanismo, la Corte Suprema de Justicia de la Nación consideró que la ley de lemas no constituye un sistema de elección inconstitucional, aunque sí reconoce que puede resultar inconveniente. De esa forma, ante un planteo de la oposición de Santa Cruz, la Corte lo que hizo fue dejar aclarado que le correspondía a esa provincia determinar sobre el sistema de votación teniendo en cuenta la autonomía con que cuenta para hacerlo, como cualquier otro distrito del país. Así surgió la determinación del actual gobernador.
Es de destacar que, así como la tuvo Santa Cruz, la ley de lemas sigue manteniendo plena vigencia en otras provincias, aunque en algunos casos no les sirvió a los políticos arraigados en las mismas para seguir manteniendo el poder por un período más, como ocurrió en San Luis y en San Juan el año pasado.
Corresponde ahora a las autoridades de Santa Cruz elegir y redactar una nueva ley electoral que contemple el sistema que remplazará a la denominada ley de lemas. Si ello no ocurre antes de las próximas elecciones, regirá momentáneamente el sistema nacional.
Debe darse la bienvenida a todo avance institucional que, como en este caso, le permita a la ciudadanía expresarse libremente en las urnas, sabiendo que no será objeto de ninguna especulación por parte de dirigencias que se consideran dueñas del poder.