Hay distintas gestiones de apoyo y adhesión a la defensa del patrimonio cultural repartido en el territorio. Nos referimos a la labor que realizan diferentes organizaciones del campo civil que bregan por mantener en pie y de la mejor manera, los bienes patrimoniales.
Una de esas entidades es la ONG Cultura&Patrimonio (1995-2024), basada en la ciudad de San Martín, que desde algún tiempo promueve la visibilización y concientización de diferentes patrimonios culturales y arquitectónicos que se quiere mantener.
Los militantes del grupo en cuestión han hecho pública su preocupación sobre distintos bienes del patrimonio histórico de la Región Este, en nota enviada a la directora de Patrimonio de la provincia, Cristina Sonego, una especialista en conservación y restauración patrimonial. Fue quien se hizo cargo, para mencionar uno de sus trabajos más destacados, de la restauración íntegra del Museo Provincial Emiliano Guiñazú-Casa de Fader, antes de la pandemia de Covid-19.
Su presencia en el cargo es un paso a favor de los patrimonialistas privados del Este porque la funcionaria conoce la mayoría de los hitos sobre los que se demanda atención y porque además Sonego no es partidaria de acciones aisladas, sino de ejecutar un plan que abarque los bienes patrimoniales de toda la provincia, y a partir de esa circunstancia delimitar prioridades y actuar en consecuencia.
Así lo explicitó a diario Uno en marzo pasado, cuando asumió el cargo. “Nosotros estamos abocados -dijo- a atender la conservación preventiva, porque cuando el daño ya está hecho en un determinado lugar, lo que se hace es atender en forma puntual ese deterioro. Hay un paradigma en la conservación patrimonial que dice que se deben aplicar soluciones especiales para casos especiales”.
Los hombres y mujeres de Cultura&Patrimonio han manifestado su “preocupación” por determinados sitios en deterioro en mayor o menor grado y que, como dijimos, la directora conoce.
Un resumen de los casos arranca con el Solar Histórico de Orfila (exgranero del general José de San Martín), en La Colonia (Junín). Debe advertirse que este espacio se encuentra en proceso de remodelación por el municipio de Junín con vistas a su reapertura, en atención a que es un lugar de mucha atracción para el público.
Otro deseo de los peticionantes es dar carácter de patrimonio inmaterial a la vida y obra del filósofo Enrique Dussel (1934-2023), nacido en el departamento de La Paz, cuyo fallecimiento se produjo el año pasado en México, donde residía.
También requieren atención la Capilla San Pío X (San Martín); el Convento de las Hermanas de Ivrea, cuyas monjas fueron enfermeras en el hospital Ítalo Perrupato.
Otro punto que se quiere proteger es la casa patronal de la Familia Oliva (1860-1880), vestigio inmaterial que dio origen al pueblo de La Colonia. En vistas de la necesidad y urgencia que requiere la conservación y puesta en valor de los bienes descriptos (debe aclararse que hay otros), se abre una interesante instancia para que las autoridades del área y el grupo patrimonialista posibiliten las declaratorias y administrativas correspondientes, para lograr en tiempos prudenciales que las solicitudes planteadas tengan un desarrollo práctico y comprobable por los ciudadanos.
Los particulares han hecho mucho con su tarea de inventario de estos lugares, pero sin la gestión técnica de la Dirección de Patrimonio, y sus guías de procedimientos, nada se podrá hacer para que se cumpla la Ley 6.034 de Patrimonio Cultural.