Aunque parezca reiterativo, siempre es importante destacar que Manuel Belgrano es uno de los principales próceres argentinos. Su participación en el primer gobierno patrio de 1810, donde fue un puntal por sus ideales de libertad y republicanismo, y su incorporación a las filas militares para convertirse en uno de los conductores de nuestra consolidación como país soberano, hablan claramente de su vocación independentista por sobre toda otra especulación. No fue la formación militar su base, pero su inteligencia y cultura lo convirtieron en el General y creador de la Bandera al que año a año se le tributa homenaje.
De Belgrano también cabe resaltar su trascendencia como educador, economista, abogado y periodista. Sus estudios universitarios en Europa mucho colaboraron en su formación a favor de la libertad y la igualdad de oportunidades.
Justamente, la faz periodística de Belgrano fue una de sus principales facetas en aquellos tiempos de emancipación. El “Correo de Comercio”, periódico que dirigía, incluso, antes de la Revolución de Mayo, se transformó en una usina intelectual para la prensa, además de difusor de las ideas independentistas que apuntalaron la gran gesta.
“La libertad de prensa -decía Belgrano a través de las columnas de su periódico- es la principal base de la ilustración pública, necesaria para la instrucción, para el mejor gobierno de la Nación y para su libertad civil, para evitar la tiranía de cualquier gobierno que se estableciera”. “Sólo pueden oponerse a la libertad de prensa los que gustan mandar despóticamente”, señalaba al respecto en sus escritos.
Además, Belgrano resaltaba en aquellos tiempos la función de la prensa libre como base necesaria para la instrucción pública. “A través de ella -decía- se comunican las luces de los hombres estudiosos y sabios a los que no lo son”. Un precepto que no ha cambiado con el tiempo, puesto que las líneas de pensamiento y los ideales libertarios se consolidan a través de los medios de comunicación cuando estos fomentan sin presiones tales premisas.
Pensadores y analistas de nuestra historia rescatan el aporte de Belgrano entre los impulsores de la libertad de prensa en la Argentina. De esas raíces surgió una línea de periódicos que a través de los años aportaron a la doctrina de la autonomía del periodismo.
En estos tiempos en los que los avances de la tecnología permiten una abundancia de mecanismos de difusión con los que, lamentablemente, muchas veces se presiona a favor de intereses políticos o sectoriales o se difunden informaciones falsas o degradantes, es vital rescatar las convicciones sobre la libertad de prensa de ilustres personajes de nuestra historia fundacional, como Manuel Belgrano.