Desde hace varios años una antigua casa ubicada en la zona Norte de la ciudad de Tunuyán es considerada patrimonio provincial por declaración de la Legislatura de Mendoza, en razón de que en ese inmueble se hospedó el general San Martín en dos oportunidades de su vida.
En una ocasión ocurrió antes de la gesta, en 1816, cuando el héroe concurrió a parlamentar con los indios pehuenches, y la restante se dio al regresar de la misión libertadora, en 1823.
En 2015, la Cámara de Diputados de Mendoza declaró Patrimonio Cultural de la provincia a la “Casa de los Villanueva”, ex Estancia El Totoral.
Este sitio vio nacer la historia de Tunuyán, pero mucho antes también albergó -al menos en dos ocasiones- al Padre de la Patria.
Con anterioridad, el solar fue declarado patrimonio departamental en 1989 y de interés provincial y cultural en 1993.
En la propiedad -a la cual se accede por la calle Melchor Villanueva en el ingreso Norte del departamento- ya no queda mucho por recuperar y su estado es muy precario.
Se observan unas paredes de anchos adobones que soportan el paso del tiempo, una galería de techo de paja, pisos de pinotea imposibles de reconocer y muy poco más.
Con la declaratoria patrimonial, los legisladores buscaron proteger los elementos de valor histórico que puedan quedar en el lugar.
El sitio claramente es un testimonio del pasado del Valle de Uco, ya que son escasos los inmuebles que aún quedan en pie en la provincia de esa época.
El lugar tiene una placa que avisa al visitante que está frente a una casa histórica, donde descansó San Martín en las oportunidades citadas.
El pasado 29 de enero se cumplieron los 200 años del momento en que, según se reconstruyó históricamente, el Gran Capitán se hospedó en ese solar luego de regresar a Mendoza tras completar la gesta libertadora.
La intención de la Asociación Sanmartiniana del Valle de Uco y de la Municipalidad de Tunuyán es poner en valor este inmueble, así como también hacerle las refacciones necesarias para mantenerlo como lo que es: un patrimonio histórico.
Pese a los más de dos siglos que acredita, no está incluida dentro de los grandes monumentos e hitos sanmartinianos.
La propiedad, como se ha expresado, posee relevancia por la vinculación con el Padre de la Patria y asimismo es un hito para el Valle de Uco, en especial con relación a la fundación del departamento de Tunuyán.
La presidenta de la Asociación Sanmartiniana de Mendoza, Liliana Llorca, también se refirió a la trascendencia del inmueble en la estadía de San Martín en la provincia, con amparo de la tradición oral y de boca en boca que se ha ido transmitiendo.
Otros apoyos para que este inmueble no se pierda para siempre parten de la historiadora Beatriz Bragoni, también columnista de este diario, y la Asociación Damas Pro Glorias Mendocinas, a través de su presidenta, Susana Villegas Marcó.
La investigadora del Conicet sostiene que la construcción tiene una importancia fundamental, no solo por la relación con San Martín, sino por el hecho de que siga en pie.
Las Damas Pro Glorias, según expresión de su titular, “bregan por la restauración y conservación de inmueble tan ligado a la gesta sanmartiniana, perteneciente en aquellos días a una familia unida estrechamente por vínculos afectivos a la del Libertador y su esposa Remedios”.
