Con su décima edición en Sudamérica, el Dakar habla cada vez más español, no sólo por el mayor número de participantes hispanoamericanos, sino porque este año estos son candidatos para ganar el rally en todas sus categorías.
Tras las seis primeras etapas de este Dakar 2018, pilotos españoles, argentinos, chilenos y peruanos están en liza para llevarse el rally tanto en motos y coches, las dos grandes categorías de la prueba, como en camiones, quads y vehículos utilitarios todoterreno (UTV).
Sus opciones de triunfos deberán ser refrendadas en las ocho etapas restantes, donde los caminos en altura de Bolivia y los ríos secos y pampas arenosas de Argentina marcarán un rally muy distinto al de los cinco primeros días transcurridos casi íntegramente por las dunas del desierto de Perú.
En motos, el argentino Kevin Benavides (Honda) se convirtió al término de la sexta etapa en el primer argentino que lidera el Dakar, aunque mantener la primera posición en lo que queda de carrera será complicado, pues hay una decena de pilotos que le siguen muy de cerca.
Entre ellos están los españoles Joan Barreda (Honda) y Gerard Farrés (KTM), tercero en el último Dakar, aunque ambos llegaron al Dakar tras superar sendas lesiones complicadas en los últimos meses.
En el caso de Barreda, el piloto castellonense ha corrido los últimos días del Dakar con dolor en su muñeca izquierda, lo que le impide participar en plenitud de condiciones.
Farrés está en mejor condición física y se ha planteando una carrera de menos a más donde espera dar el golpe en los próximos días, aunque sabe que es complicado, pues todos sus rivales son pilotos oficiales de Honda, Yamaha y KTM.
En coches es el español Carlos Sainz (Peugeot) quien lucha por ganar su segundo Dakar, aunque para ello debe recortar más de 27 minutos de ventaja respecto al líder de la carrera, el francés Stéphane Peterhansel, su compañero de equipo.
A favor de Sainz juega que las próximas etapas transcurrirán por caminos, donde el madrileño se siente más cómodo que en las dunas, un escenario más propicio para el piloto galo, como demostró en las primeras cinco etapas de esta edición.
Los quads son asunto del chileno Ignacio Casale, quien lidera la categoría después del abandono del ruso Sergei Kariakin, quien era su principal contrincante para arrebatarle el título.
Con Kariakin fuera de concurso, los pilotos que tienen opciones de impedir que Casale gane su segundo Dakar son el peruano Alexis Hernández y el argentino Pablo Copetti.
En camiones, el argentino Federico Villagra (Iveco) ha lanzado una cruzada contra la flota de camiones rusos Kamaz, grandes dominadores de la categoría.
El piloto de Córdoba, ganador de dos etapas en este Dakar, está segundo en la clasificación general, a menos de una hora del ruso Eduard Nikolaev (Kamaz), vigente campeón del rally, y busca recortar esa diferencia para coronarse en su ciudad natal.
De lograrlo, Villagra se convertiría en el primer piloto hispanoamericano en ganar el Dakar en camiones, una categoría tradicionalmente dominada por checos, holandeses y, ahora, por rusos.
La nueva categoría de los UTV también es un asunto de pilotos sudamericanos, donde los hermanos peruanos Javier y Juan Carlos Uribe, debutantes en el Dakar, están en segunda posición, a poca distancia del brasileño Reinaldo Varela.
En las 39 ediciones anteriores del Dakar, solo los españoles Joan 'Nani' Roma (2004) y Marc Coma (2006), en motos, fueron capaces de triunfar en el rally más duro del mundo.
Sin embargo, desde que el Dakar se corre en Sudamérica, Coma lo ganó cuatro veces más en moto, Roma hizo lo propio en coches, Sainz también triunfó en autos, los hermanos Marcos y Alejandro Patronelli lo ganaron cinco veces en quads y Casale venció otra vez más en la misma categoría de cuadriciclos.