La dificultad que presentaba el compromiso era proporcional a la magnitud del premio que significaba superar el obstáculo. Para quedar en las puertas de verse las caras ante el River campeón de América, Gimnasia necesitaba vencer a un adversario de mayor jerarquía, que no sólo viene siendo protagonista en la Superliga, sino que todavía sueña con entrar en la Copa Sudamericana 2020.
Ante un Gimnasia bien parado, con dos líneas de cuatro, Aldosivi comenzó manejando la pelota, era prolijo en el primer pase, pero se nublaba al llegar a las inmediaciones del área de un equipo de Bianco que, con dos líneas de cuatro, esperaba bien cerrado y ordenado con la presión escalonada como estandarte para jugar ese capítulo inicial.
Así, el comienzo se hizo lento, pausado, aburrido. La primera media hora fue de estu
dio. Y el desarrollo comenzó a desequilibrarse cuando Stracqualursi metió un frentazo que generó una volada espectacular de Marchiori para salvar la caída de su arco.
Pero la ráfaga siguió. Tras el córner y un remate de Villalba, el balón le quedó a Amor adentro del área y el ex Vélez levantó el remate ante el achique desesperado de Marchiori. Al Lobo le mojaron la oreja y reaccionó en la jugada siguiente. El "Pela" Aguirre lo vio entrar a "Pato" Cucchi por el punto del penal y le puso la pelota en la cabeza para el frentazo que se fue apenas alto.
Y se armó el partido; dejó atrás el letargo y apareció el ritmo del fútbol de Primera. Lucas Fernández se animó a pasar al ataque, Cucchi saltó otra vez con Amor y su cabezazo fue otra vez defectuoso. Diego Auzqui también probó de afuera los reflejos de un bien ubicado Fabián Assmann, aunque el rebote no favoreció a ningún jugador del equipo mendocino. Cuando el primer tiempo llegaba a su fin, Pisano asistió a Colman por la derecha, pero el volante de Aldosivi levantó el remate.
Ya en el complemento, el “Lobo” comenzó mejor que Aldosivi.
A los 5’ Matos sacó una mediavuelta que se fue cerca del ángulo izquierdo. El “Tiburón” seguía teniendo el balón, pero ya a esa altura la intensidad había mermado considerablemente. El equipo de Bianco lucía seguro y si alguien fallaba, ahí estaba el enorme Marchiori para salvar la caída de su arco, como en ese cabezazo que salvó ante Galeano un minuto antes de la jugada que rompió el resultado.
Pelotazo largo, Videla calculó mal y Bauza se fue cara a cara con Assmann. A pesar de que Cucchi venía por el medio para empujarla, el “14” hizo la personal, gambeteó al arquero, quien lo tocó abajo. Penal que el Pato cambió por gol con un remate violento, furioso, al medio del arco.
Había que aguantar los últimos minutos. Aldosivi fue con lo que le quedaba y ahí aparecieron los hombres y los nombres de Gimnasia para sostener una victoria épica. Cheque, clasificación y premio: el potencial duelo nada menos que ante River. Este es el famoso “Lobo”...
¿Peligra el partido del fin de semana frente a Arsenal?
Los empleados de Arsenal, bajo el convenio de UTEDYC, comenzaron el lunes una medida de fuerza por el atraso en el pago de dos meses de salarios y el aguinaldo de estos trabajadores.
Si la situación no se soluciona en los próximos días habrá que ver qué sucede. Algunos, por lo bajo, ponen en duda el duelo.
Se queda en Baires
Aún con la incertidumbre a cuestas, el plantel mendocino permanecerá en Capital Federal a la espera de saber si finalmente juega el próximo sábado, desde las 14.30, frente a Arsenal, en Sarandí.
Por esa razón, el “Chaucha” Bianco llevó en la delegación a 20 futbolistas. Ayer, el defensor Miguel Barbero y el delantero Nicolás Romano quedaron afuera del banco de suplentes.
Marcado a fuego
El estadio del “Gasolero” le trae buenos recuerdos al “Lobo”, que en 2017 venció por penales a Quilmes (fue 4-1 después de empatar 0-0 en los 90’), por los 32avos. de Final de la edición 2017. Luego, en 16avos, superó por penales a Talleres de Córdoba y cayó en 8vos con Olimpo (BB).
