Gimnasia puso fin a una racha de tres encuentros sin victorias (un empate y dos derrotas), con una gran actuación frente a uno de los históricos que tiene el fútbol nacional: Ferro Carril Oeste.
El Lobo venció 3-1 y volvió a lo más alto de la tabla de promedios de la Zona Interior, además de subir varios escalones en la tabla de posiciones hasta ocupar nuevamente un lugar entre los que hoy estarían ingresando al octogonal por el segundo ascenso.
Lo arrolló desde el comienzo Gimnasia por la determinación para salir a jugar desde el pitazo inicial. Antes del minuto, ¡desde un córner! el Lobo consiguió la ventaja que había salido a buscar. Cortizo cabeceó defectuoso y Gabriel Fernández, de media vuelta, venció la débil resistencia de Bailo.
Enseguida nomás consiguió ampliar con un golazo de Pato Cucchi y la tarde se encaminaba para un festival de goles. Sin embargo, Ferro supo reaccionar cuando ya había pasado media hora del capítulo inicial, aunque casi no encontró los caminos hacia el arco de Marchiori.
Con la ventaja en su favor, el local decidió intentó mover el balón hacia las bandas, frente a un rival que no tenía ideas para provocar riesgo alguno sobre el arco de Marchiori. De contragolpe pudo ampliar Gimnasia, aunque hubo imprecisiones que conspiraron contra esa intención. El “Pela” Aguirre, la figura de la tarde, casi convierte un gol de antología, con Bailo adelantado. Desde 25 metros, el lateral provocó la estirada del arquero, quien alcanzó a rozar el balón antes de que se estrellara en el travesaño.
Casi no pasó sobresaltos el local, salvó ese fatídico minuto 43, cuando el descuento de Ferro (golazo de Torres) encendió las alarmas en el banco local. Antes y después, más allá de bajar la intensidad con que jugó el primer capítulo (el calor por momentos se hizo insoportable), siempre dio seguridad sobre el plan pensado en la semana.
La intención de cerrar a los carrileros para que por afuera aparecieran los laterales fue un problema sin solución para un rival que defendió mal y se equivocó mucho en las entregas (Gimnasia presionó en la salida y lo obligó a lanzamientos frontales, demasiado fácil para su última línea).
El control del juego nunca estuvo en manos de la visita; esa quizás fue la virtud más destacada de Gimnasia, que leyó muy bien los momentos del encuentro. Cuando pudo jugar, jugó y cuando tuvo que meter...
Cortizo se dio una vuelta por el área visitante para ampliar el marcador luego de una jugada preparada y Ferro ya no volvió a complicar.
El Lobo se fue del Parque celebrando por varios motivos: cortó una mala racha, venció a un grande de la categoría y el equipo estuvo a la altura. ¡Cómo para no subirse al tren de la alegría!
