A un mes de que termine esta segunda temporada de "Bake Off", y aún en plena cuarentena, este reality de pastelería se acaba de alzar en el podio de la producción nacional, pues se conoció que es el producto televisivo argentino más visto. Producida y emitida los domingos por Telefe -y en Mendoza por Canal 9-, se ha convertido en un verdadero furor, sobre todo en redes sociales.
Según datos de Ibope Kantar Media Argentina, el podio de mayo lo comparten "Jesús", la ficción brasileña producida por la Iglesia Universal del Reino de Dios con 12.5 puntos; la novela turca "Y tú quién eres" y "Bake Off", ambas con 10.5.
Las razones del éxito
"El programa es excelente, bien hecho, con participantes que saben y se la juegan a fondo en una competencia con dignidad, sin golpes sucios: con cocina, pastelería y amor por la pastelería", aseguró Christophe Krywonis, quien oficia de jurado, a Télam.
"El éxito de la gastronomía se debe a que hay mucha nobleza en cocinar, es una forma muy digna de ganarse la vida. Los libros más vendidos históricamente son los de recetas", resaltó Christophe, francés que vive desde hace 31 años en nuestro país, donde "El libro de Doña Petrona" comparte el pedestal de los más vendidos junto al "Martín Fierro" y La Biblia.
Mientras en el mundo real las noticias oscilan entre números de infectados de Covid-19, muertes, extensiones de cuarentena, cifras económicas en rojo y estallidos sociales, cada domingo a las 22 el drone que muestra una inmensa carpa blanca en un campo verde de algún rincón de la Provincia de Buenos Aires con 14 puestos de cocina dentro se impone como un bálsamo en la pantalla.
Grabado en 2019, quienes formaron parte de esta segunda temporada del reality, que conduce Paula Chávez, jamás imaginaron que la idea de pasteleros ayudándose entre sí sin barbijos ni distanciamiento social, de abrazos y manos en la masa sin alcohol en gel, podrían resultar anhelos lejano por parte de los espectadores (y de ellos mismos) un año después.
"El fenómeno 'Bake Off' ayudó bastante a la gente a distraerse en cuarentena, a abstraerse un poco de las noticias", dijo a la misma agencia Damián Betular, jurado junto a Christophe y Pamela Villar.
“Es una hora y media de momentos dulces, contención, llantos, alegrías, logros y cuando escuchan el ‘3, 2, 1, pasteleros, un paso para atrás’ la gente se compenetra, se identifica con cada participante, sus historias, debilidades, fortalezas y eso hace que este formato sea realmente único”, agregó Betular sobre el show, cuyo premio es de 600 mil pesos.
Christophe analizó: “Si vos tenés una hermosa carpa, pero sin contenido, no funciona, es un programa que está hecho con mucho profesionalismo de todos lados: de Paula, los jurados, los participantes, todos hemos trabajado mucho para hacer un programa de calidad”. Consultado por su rol, aseguró que los participantes “no le temen a él, sino que están nerviosos”.
“No por mí -aclaró- sino por la competencia, aunque a veces reconozco que me muero de risa por las caras que pone Damián”, dijo ante las preparaciones fallidas de los participantes.
Betular, por su parte, calificó su aporte a las evaluaciones como “técnico”. “Cuando me gusta me gusta, y cuando no me gusta no me gusta, pero soy bastante comprensivo porque yo no podría estar nunca en una competencia, porque me pondría muy nervioso”, contó.
“El formato no tiene malos -agregó- no te piden nada, te piden que seas como sos y yo en mi vida personal soy una persona exigente y meticulosa. Y eso lo traslado al momento de evaluar las preparaciones”, agregó.
Las cifras del fenómeno
Por fuera de la televisión abierta, Datastudio reveló que la sección dedicada a "Bake Off" en Telefe.com tuvo 315.000 usuarios únicos, el 81 por ciento son mujeres y el 50 por ciento del total tiene entre 18 y 34 años.
En Twitter, el envío suele ser tendencia los domingos a la noche, cuando los usuarios de esa red poco benévola se hacen festines con preparaciones malogradas de algún participante, que devienen en cataratas de memes, comentarios ingeniosos y posiciones a favor o en contra.
“Yo uso sólo Instagram porque Twitter me parece un poco agresiva -dijo Samanta a Télam, una de las cinco finalistas- pero en cada programa explotan las redes y es una locura cómo nos han crecido los seguidores a todos, y es muchísima la gente que nos apoya, no podemos creer las cosas que pasan”.
Para Damián, otro de los finalistas, eso sucede porque “’Bake Off’ transmite una dulzura muy necesaria para distraerse, porque emana alegría, frescura, algo que renueva la tele que tenemos ahora”, arriesgó. Télam