El equipo argentino de Copa Davis no jugará en Tel Aviv, ante Israel, la serie de repechaje para mantenerse en el Grupo Mundial, en una decisión que tomó ayer la Federación Internacional de Tenis (ITF), y se deberá definir una nueva sede a más tardar el lunes, según lo adelantó el presidente de la Asociación Argentina de Tenis (AAT), Arturo Grimaldi.
“Por decisión unánime de los miembros del Comité de Copa Davis de la ITF, la serie no se jugará en Tel Aviv. En las próximas 72 horas se decidirá un nuevo escenario”, confirmó el dirigente.
La resolución anunciada por la ITF se intuía de antemano, ya que era poco factible que Tel Aviv pudiera albergar un evento deportivo, del 12 al 14 de setiembre, y abstraerse del conflicto que atraviesa Israel en la Franja de Gaza, situada a escasos kilómetros de la ciudad que sería sede.
“No queremos sacar una ventaja deportiva de esta situación, que por supuesto sentimos profundamente. Es lamentable lo que atraviesan israelíes y palestinos”, añadió el presidente de la AAT, quien se reunirá en las próximas horas con el capitán argentino Martín Jaite para analizar el nuevo escenario.
La definición de una nueva sede neutral para jugar por la permanencia en el Grupo Mundial, aunque ya trascendieron algunas alternativas. En ese sentido, la serie podría jugarse en Nueva York o Delray Beach (Estados Unidos), o también se mencionó como alternativas a Cracovia (Polonia), o Tallin (Estonia), entre las principales opciones, y también existe la chance, más remota, de que sea en Buenos Aires.
“Durante la teleconferencia no se habló sobre otras sedes, pero por una cuestión de sentido común estimo que lo estarán haciendo, que habrán buscado y tomado los recaudos necesarios para organizarla en otro lugar, ya que estamos a 25 días de comenzar los entrenamientos y en 25 días no se puede organizar ni un Future”, aseveró Grimaldi.
Respecto de la posibilidad de organizar la serie en Buenos Aires, para lo que habría que invertir la localía y Argentina sería el que imponga la superficie, el directivo se mostró cauto, aunque no la descartó.
“No quisimos forzar la situación. Simplemente dijimos que estaríamos en condiciones de organizarla”, admitió Grimaldi y a su vez aclaró que en ese caso el escenario será el Buenos Aires Lawn Tennis Club.
En el caso de jugarse en el escenario ubicado en el barrio porteño de Palermo, Argentina impondrá la superficie de polvo de ladrillo favorable a sus tenistas, en oposición a los israelíes, más aptos para el cemento, el piso que esperaban poner en Tel Aviv y que también se usaría en el caso de trasladarse a los Estados Unidos.
En cuando al equipo argentino, Martín Jaite tiene prácticamente definido que incluirá a Leonardo Mayer, Carlos Berlocq, Juan Mónaco y Horacio Zeballos, es decir la misma formación que utilizó en septiembre del año pasado en Praga, en la derrota en semifinales ante la República Checa por 3 a 2.