Nacido en Buenos Aires, a Gervasio Antonio de Posadas, político argentino y abogado, los días de mayo lo llevaron primero al cargo de procurador y protector de la Ciudad de Buenos Aires. Fue reemplazado en octubre de 1810 por Miguel Mariano de Villegas, (jurisconsulto de la Real Audiencia de Bueno Aires) y más tarde debió suceder al Segundo Triunvirato, tomando el cargo de director supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata en enero de 1814, concentrando en él el Poder Ejecutivo.
Habiéndose creado el año anterior la Intendencia cuyana, y ante el propio interés de San Martín para organizar allí la campaña libertadora de Chile y Perú, es que lo designa el 10 de agosto de 1814, siendo este nombramiento una de sus principales medidas, enviándole además tropas y dinero.
Una de sus recordadas frases, es de cuando ante la queja de un empleado del Directorio, que su jefe lo maltrataba por ser español y reconocerse monárquico, reúne a ambos prohibiendo que ello se repita, porque “…es de valientes manifestar los ideales. Esa lealtad hacia su monarca hace a sus valores como hombre… (siendo) leal a nosotros en el desempeño de su tarea”.
Ante los hechos que se desarrollaban en España, atemorizado escribe a San Martín “…Nuestra situación política ha variado mucho y por consiguiente deben también variar nuestras futuras medidas”. Renuncia a su cargo el 9 de enero de 1815. Sufrió cárcel. En 1829 comienza a escribir sus “Memorias”.
*Susana Villegas Marcó es presidenta Damas Pro Glorias Mendocinas
