Imaginemos por momentos la Argentina de hace unos 150 años…¿Como entender la evolución dentro de su matriz productiva e industrial sin la fuerte participación de nuestros ferrocarriles? Ciertamente es imposible entender un modelo de crecimiento que no considere la importancia de los ferrocarriles debido a sus condiciones geográficas y distancias por recorrer entre los puntos de elaboración de `productos y los puertos.
Asimismo, pareciera que los argentinos miramos al ferrocarril como algo obsoleto o pasado de moda, cuando los países más importantes del mundo le brindan especial atención y realizan fuertes inversiones para mejorarlos y modernizarlos.
Las privatizaciones realizadas en los años 90 han sido un gigantesco ferrocidio. Personajes que vaciaron empresas centenarias, con la promesa de darles protagonismo y solo se ocuparon de llenar sus arcas a costa del patrimonio nacional que son las vías, estaciones, sistemas de señalización, locomotoras y vehículos. Gente que, (como un conocido empresario mendocino de la metalmecánica) trajo locomotoras de Renfe (España) radiadas, para ocultar la terrible destrucción que le estaban produciendo (por falta de mantenimiento) a las locomotoras recibidas en la concesión.
El Ferrocarril General San Martín contaba con 200 kilómetros de vías (entre Alto Verde y Beazley) comandados desde la capital de Mendoza eléctricamente. Era un sistema semaforizado, con cambios manejados desde una base que permitía el cruce simultaneo de trenes (sin detenerse) y que fue reemplazado por palancas manejadas por operarios, retrocediendo cien años en la operación. La explicación: caro su mantenimiento.
También debemos recordar que los trenes de pasajeros circulaban a 120 km horarios, con frecuencias diarias y un pasaje accesible a la gente haciendo el trayecto entre Mendoza y Buenos Aires en 12,45 horas. Últimamente se burlaban de las 29 horas que tardaba en la actualidad, sin preguntarse cuáles fueron las causas que lo ocasionaron. Hay responsables.
Las vías férreas son soberanía. No existe algo más soberano que el ferrocarril puesto que fue y es una fuente inagotable de crecimiento. Pero nosotros lo dilapidamos.
Roberto Bocanegra. DNI 14.978.130.