La noticia decía… “se subastarán las veintitrés hectáreas de terrenos del_ ferrocarril sobre calle Perú y estará en manos de un privado hacer el negocio”.
Tierras pertenecientes al medio de transporte que transformó a la República Argentina y aún lo continúa haciendo a pesar de los ataques mediáticos y políticos que recibe.
¿Quién podría justificar ver esos terrenos “baldíos” cómo se los llama…?
Aun así, la historia se revuelca en la tristeza de saber con certeza que ya nunca más veremos un tren llegar al corazón de nuestra Ciudad.
Si la venta sugiriera reinvertir en el ferrocarril, podríamos tratar de entenderlo, pero en realidad será un mero negocio inmobiliario.
¡Pobre ferrocarril! Aún con lo que significaste, citan al futuro para destruirte sin ningún remordimiento. Y el silencio de la gente frente a estos hechos no hacen más que confirmarlo tan dolorosa realidad.
En mi opinión, vamos directo a una disolución de nuestra Patria tal como la conocimos, aquella que San Martín y sus hombres supieron forjar para nosotros.
Que Dios nos perdone por no haber entendido nada.
Roberto Bocanegra. DNI: 14.978.130.