En 2014, en el aniversario de Luján de Cuyo, el ex intendente Carlos Puelles anunciaba los inicios de las obras de construcción del prometido hospital, acompañado en esa oportunidad por el también ex gobernador Francisco Pérez.
Este último sostuvo entonces que “se trabajará en la construcción de la terminal de ómnibus porque es uno de los pocos departamentos que aún no cuenta con una terminal” (hasta la fecha nunca se hizo).
Además anticipó la licitación para que “el Metrotranvía llegue hasta aquí por ser este un servicio necesario y económico”.
Sus afirmaciones sorprendieron a los lujaninos porque se sabía de los conflictos políticos entre Pérez y Alfredo Cornejo y ello quedó confirmado cuando el ex ministro de Transporte Diego Palau reconoció que el Metrotranvía no lograría unir Luján con el Gran Mendoza debido a que no había acuerdo respecto a la reubicación de la ciclovía que construyó Cornejo encima de las vías del ferrocarril que pertenecen a la Nación.
Y a siete años de este suceso que ilusionó a los lujaninos es bueno recordar que el gobernador Rodolfo Suárez acaba de prometer ampliar la traza del Metrotranvía para conectar Panquehua con el aeropuerto Francisco Gabrielli (6 km) y luego desde Godoy Cruz (Pedro Pascual Segura y Pellegrini) hasta el parque Benegas.
Esto por una parte, ya que el secretario de Servicios Públicos Natalio Mema, muy entusiasmado, salió a decir que “en una tercera etapa se continuarán las obras hasta Luján de Cuyo con un total de catorce paradores y tres estaciones con playas de transferencia y servicio”.
Mientras a estos funcionarios se les ocurra cómo readaptar esta obra faraónica efectuada en el parque Benegas, los vecinos de Luján seguirán esperando la llegada del Metrotranvía con la ilusión de los Reyes Magos.
Solamente resta confiar en que estas promesas se materialicen en hechos y sin politiquería de ninguna índole.