Le escribimos al señor intendente de Malargüe, Juan Manuel Ojeda, porque se acerca la Fiesta Nacional del Chivo.
En la misma se masacran cada enero miles de seres inocentes. Esta “tradición” implica una vulneración masiva de los derechos de los animales no humanos (ANH), de seres sintientes que su único deseo es vivir.
No concebimos que el paladar y/o los recursos económicos se erijan en valores superiores al sagrado derecho a la vida. Por ello este evento festivo resulta indignante y repulsivo.
Pedimos y exigimos se suprima y se excluya para siempre del calendario de acontecimientos turísticos (o lo que fuere) del departamento semejante atrocidad.
Le hacemos saber que la matanza constituye un biocidio; viola expresas disposiciones legales, tanto de orden provincial, nacional e internacional.
Por ello, estamos dispuestos a concurrir a la Justicia para hacer valer los derechos de nuestros representados, los animales.
*El autor es Asoreva y Proyecto hospital público veterinario de Mendoza.