Hace dos años, la cantante Rihanna se mudó a una mansión deslumbrante en Beverly Hills. La estrella de 35 años adquirió una propiedad ubicada en uno de los complejos más exclusivos de la zona por un valor de 11,3 millones de dólares y hoy en día disfruta de todas las comodidades que esta ofrece.
Además de centrarse en su carrera musical, Rihanna ha estado enfocada en su carrera empresarial con su propia marca de cosméticos y lencería.
Con esta adquisición fascinante, la artista internacional vive a solo unas cuadras de Madonna, Paul McCartney y Mariah Carey.
La vivienda, que fue construida hace más de 90 años, fue objeto de varias remodelaciones a lo largo del tiempo, lo que la dejó con una apariencia moderna y lujosa.
La casa cuenta con techos altos y puertas de gran tamaño que permiten que los distintos espacios abiertos sean funcionales y se puedan cerrar cuando se necesita intimidad.
La mansión tiene más de 700 m2, su diseño es contemporáneo combinado con techo de metal negro de toques más tradicionales. El terreno donde vive Rihanna tiene más de 2.000 metros cuadrados.
El vestíbulo es uno de los rincones destacados, es dominado por una escultura de un toro negro gigante; tiene un patio central al aire libre con terraza, piscina, spa y parrilla.
Más detalles de la mansión de Rihanna en Beverly Hills
En su interior, el blanco gana protagonismo como así también las lámparas y el mármol. La sala de estar tiene una chimenea protagonista y, en la planta superior, la suite principal se lleva todas las miradas. Es que cuenta con un armario hecho a medida y su baño tiene una puerta que conecta con una sala de estar al aire libre.
Además cuenta con siete baños y cinco habitaciones extras con vistas al exterior, el cual está cubierto de vegetación y los jardines están sumamente cuidados.
Algunos de los requisitos de Rihanna fueron: ángulos rectos y limpios, el color blanco como tonalidad principal, mobiliario justo y funcional, jardín amplio en el exterior y, sobre todo, una iluminación natural y perfecta que destaque por encima de todo. Todo eso tiene su hogar y ella disfruta a diario.