La casa de Gran Hermano se convirtió en un hervidero de emociones luego de que Bautista hiciera una confesión inesperada a Juliana, mientras Mauro, su pareja, estaba presente, generando una tensión palpable entre los habitantes.
Durante la preparación de la comida, Bautista sorprendió a todos al intentar seducir a Furia frente a Mauro, su compañero en la casa. La situación desconcertó a los presentes y desató todo tipo de especulaciones sobre las intenciones del concursante.
El incidente se sumó a la serie de acontecimientos extraños que han sacudido la casa últimamente, como el peculiar estornudo de Manzana que algunos fanáticos compararon con un “orgasmo”, generando un revuelo en las redes sociales.
La tensión en la casa se intensificó aún más cuando Virginia y Manzana tuvieron una conversación incómoda en el cuarto, levantando sospechas de un posible complot. Aunque el rugbyer escuchaba en silencio, las miradas cruzadas y las sonrisas nerviosas de los demás participantes alimentaron las especulaciones sobre lo que realmente estaba sucediendo.
La situación alcanzó su punto álgido cuando Furia confrontó a Bautista por su comportamiento. “¡No me enamores, pelot..., estás de novio con otra! ¡Bautista, pará un poco!”, exclamó Furia visiblemente molesta, mientras que Bautista respondía coqueteando abiertamente con ella.
La última gala de eliminación
La eliminación de Damián agregó más drama a la noche, ya que la placa se definió por voto positivo del público, dejando a los participantes menos respaldados en una situación de vulnerabilidad. Con solo el 8,9% de apoyo, Damián se convirtió en el nuevo eliminado de la casa.
La gala de eliminación estuvo llena de sorpresas, con resultados inesperados que mantienen a los seguidores del programa al borde de sus asientos.
Con cada semana que pasa, la competencia se vuelve más intensa y los lazos entre los participantes se ponen a prueba, dando lugar a momentos de tensión y emoción que mantienen a todos en vilo.