El arte tiene, entre muchas cualidades propias, la capacidad de curar las heridas emocionales o transmutar los estados de ánimo con belleza, empatía y hasta con la exposición descarnada de aquellas cosas que provocan dolor. Es un mecanismo contradictorio pero aún así, funciona. Sobre esta paradoja se para Nadia Ferreyra, productora de espectáculos del bar cultural Umbrella (ex Soul Café, San Juan 456 de Ciudad) para plantear -a través de un nuevo ciclo de teatro- temas vinculados a dolores emocionales, psíquicos y duelos personales acallados por la mordaza social del tabú.
El ciclo se llama “¿De eso no vamos a hablar?” y debuta el 1 de noviembre con un tema que en cierta medida es un homenaje. Nadia perdió a su madre el 30 de octubre, hace un año, aunque en verdad ya la había perdido mucho antes a causa de una enfermedad que será el tópico de la primera obra.
“Ella empezó con muchos problemas de salud -durante la pandemia- pero no sabíamos qué era lo que tenía y el médico solo nos decía que debía tomar más agua, pero nunca nos dijeron que era demencia senil” destaca en una larga charla. “Tuvo una una partida muy fea, muy dolorosa y muy triste” admite.
Sin embargo sus experiencias de vida vinculadas con el arte le permitieron transmutar el dolor y convertirlo en un mensaje, que abre las puertas para debatir acerca de temas relegados por la coyuntura social y que sin embargo atraviesan a miles de personas.
Nadia es oriunda de Buenos Aires, se afincó en Mendoza hace 13 años y desde entonces se dedica a diversas actividades que incluyen masajes holísticos, participación activa en grupos de teatro, escritura de cuentos y creación de “susurradores” para narrar historias.
“Así surgió toda esta movida, yo soy la productora de Umbrella pero dejé el bar durante unos meses y todo lo que hacía, porque mi mamá se había enfermado y yo viajaba mucho a Buenos Aires. Además mi cabeza no estaba para nada”, recuerda. “Pero ahora volví a retomar algunas cosas y una de ellas es este proyecto” destaca en relación al ciclo de teatro. “Hay muchas cosas de las que no se hablan por tabú, y pensé en el ciclo ‘¿De eso no vamos a hablar?’. Si el arte sana, ¿por qué no usarlo para ayudar y comunicar?”, subraya.
Aunque Nadia es la productora y propiciadora de Umbrella como bar
cultural, el proyecto de teatro surgió a partir del contacto con la “Compañía Hilo Rojo”, integrado por Fabi Fara y Dana Etcheverry, quienes vienen interpretando esta obra desde algunos años.
“Cuando vi la obra pensé que era ideal para mi proyecto. Me junté con las chicas, les conté como cuál era mi idea” y comenzaron a armar el ciclo que, en principio tendrá tres presentacions: “Primero quiero hacer el tema de la demencia senil, después me gustaría hacer sobre suicidio y por último, acerca de la violencia de la mujer hacia la mujer y hacia el hombre”, subraya Nadia.
En relación al último punto, se explaya en cuanto a sus propias experiencias: “Yo sufrí violencia doméstica, me escapé de mi ex marido y sé lo que es”, y acota “pero la peor violencia la sufrí de parte de las mujeres. Entonces yo quiero hacer visibles estos temas en forma de arte”.
Si bien los temas que se abordan tienen una carga emocional y personal muy fuerte, las actrices junto a la productora decidieron encararlos con cierta dosis de humor. “Es una comedia dramática, pero los temas se abordan con respeto e información”, destaca a la vez que aclara: “el último (violencia) será un show de stand up”.
Otras actividades de Umbrella
Las puertas del ex Soul Café están abiertas con varias propuestas, como los talleres de improvisación de la mano de Guillermo García, las clásicas bandas mendocinas que se presentan viernes y sábado por la noche (el viernes pasado hizo su regreso la mítica Parió la choca), shows con música árabe, jazz, tango, folclore, rock y hasta viernes de tarot. “Es un lugar de cena show, con mucha diversidad”, concluye.